miércoles, 7 de diciembre de 2011

Nada falta a los que le temen.

¿Por qué trabaja el hombre? ¿Por qué tanto esfuerzo? ¿Por qué no se levanta a esperar que el maná caiga del cielo? Unos lo hacen porque desean tener más que otros; otros lo hacen por la motivación que tenemos todos... la supervivencia.

Ahora bien, dice la Palabra de Dios que el sol sale para todos, y que, la lluvia también cae para todos, para buenos y para malos. Entonces ¿Cuál es la diferencia?. La diferencia está en que a los malos lo que tienen les dura poco, pero a los buenos lo poco o mucho que Dios les de, es con paz y les dura mucho. El Proverbio 10:22 nos dice: "La bendición de Jehová es la enriquece, y no AÑADE tristeza con ella". ¡Qué delicioso es cuando es Dios quien nos envía la riqueza por su bendición, pues no hay dolor ni pesar alguno en ello"! El Salmista lo dice de otra forma: "Nada falta a los que le temen, pues los que BUSCAN A JEHOVÁ no tendrán falta de ningún bien" (Salmo 34:10). El salmista nos dice que si bien los que tememos a Jehová no necesariamente tendremos una manción, sí tendremos una casa; no necesariamente tendremos un Mercedes pero sí tendremos un vehículo; no necesariamente seremos gerentes, pero sí tendremos un trabajo.

NADA les faltará a los que tememos a Jehová. Qué promesa tan deliciosa, el saber que EL es quien lo promete, antes que nosotros tengamos la necesidad. Todo está en confiar y temerle a EL. Meditemos.

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