jueves, 22 de diciembre de 2011

¿De dónde vendrá mi socorro?

Como lo hemos expresado en otras oportunidades TODOS tenemos problemas, unos de salud, otros de soledad, otros económicos, emocionales, etc. y, lógicamente, TODOS queremos una solución. Pero el problema o el punto es ¿De dónde vendrá nuestro socorro?

Si nuestro socorro viene de un amigo o amiga, quizás corramos peligros emocionales que no nos imaginamos hoy; si nuestro socorro viene de alguien superior a nosotros en el trabajo, a lo mejor y nos comprometemos de más; si nuestro socorro viene de cualquier ser humano, quedamos atados a algo o a alguien, pero, si nuestro socorro viene de Dios TENDREMOS LIBERTAD ABSOLUTA. El Salmista lo miró de ésta forma: "¿De dónde vendrá mi socorro, mi socorro viene de Jehová, mi Dios" (Salmo 121:1). "Porque mi Dios no duerme, porque con el auxilio de mi Dios el sol no me fatigará de día, ni la luna de noche. Porque El me guardará de todo mal, EL guardará mis salidas y mis entradas, desde ahora y para siempre" (resto del Salmo 121). Fatigará no quiere decir que no tendremos cansancios, sino que no estaremos agobiados; y de noche dormiremos tranquilos a pesar de los problemas.

Tenemos algún problema hoy, pues HOY es el día que Dios hizo para ayudarnos. Desde la eternidad Dios ya estaba pensando en el día de HOY para socorrernos. BUSQUEMOLO y pidámosle ayuda. El quiere proporcionarnos SU socorro HOY. Meditemos.

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