martes, 21 de febrero de 2012

Procuren ocuparse en buenas obras.

La gran mayoría de personas adultas trabajamos, nuestro horario de trabajo varía dependiendo cada actividad por supuesto, pero las escrituras nos exhortan a que, además de nuestras labores diarias, el tiempo que nos queda libre lo ocupemos bien.

La forma en que las escrituras nos recomiendan utilizar ese tiempo es en hacer buenas obras. Nos hace falta nos dice Pablo, aunque directamente le esté hablando a Tito en su epístola, capítulo 3 y verso 8: " Los que creen en Dios, procuren ocuparse en buenas obras". Ahora bien ¿qué considera Pablo como buenas obras?, en ese mismo verso lo dice: "lo que es útil y bueno para los hombres". La mejor manera que demos testimonio de que somos personas que conocemos a Dios, que estamos entregadas a Dios, no es precisamente tomando un mircrófono portátil y ponernos a gritar como locos en un parque, o en una calle, a decirle a todo mundo que se va ir al infierno si no acepta a Cristo. La mejor manera que tenemos de dar testimonio es SIENDOLO. Y somos testimonio cuando hacemos buenas obras, obras que sean útiles a otros.

La idea de Dios Padre cuando nos envió a su unigénito no sólo fue salvarnos, sino fue que nosotros también alcanzáramos a otros. Esa fue la misión que Cristo les encomendó a los doce, que le encomendó a Pablo, y que nos encomienda a nosotros. Y, como dice Pablo, una de las mejores formas de alcanzar a otros, es que nos vean haciendo buenas obras. Meditemos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario