martes, 24 de abril de 2012

El falso ayuno.

Uno de los puntos en los cuales actualmente las congregaciones ponen mucho énfasis, es en el ayuno de abstinencia de alimentos. Pero, muy lastimosamente lo hacen como lo hacía el pueblo de Israel en tiempos de Zacarías, y, hemos de decir que es un ayuno que lejos de agradar a Dios lo ofende, miraremos el por qué.

El pueblo de Israel tenía desde sus albores la orden de ayunar PARA agradar a Jehová, pero con el transcurso del tiempo el mismo se convirtió en una forma de chantaje de parte del pueblo para con Dios, pues ayunaban para "conseguir" un favor de Dios, ya no por o para agradarlo. En tiempos de Zacarías Dios se lo hace saber al pueblo y les dice cuál es el "verdadero ayuno" que a él le agrada. Y, dicho sea de paso: NO ES PRECISAMENTE EL DEJAR DE COMER. Veamos: "Zacarías, habla a TODO EL PUEBLO DEL PAIS, y a los SACERDOTES, diciendo: Cuando ayunasteis y llorasteis durante los setenta años ¿habéis aynado para mí?; y cuando coméis y bebéis ¿no coméis y bebéis para vosotros mismos? dice Dios (Zacarías 7:5-6). Y entonces nos (Dios) dice cuál es el verdadero ayuno que le agrada: "Juzgad conforme a la verdad; haced misericorida y piedad a tu hermano; no oprimáis a la viuda, ni al huérfano, ni al extranjero,  ni al pobre; ni ninguno piense mal contra su hermano" (versos 9-10).

No es por dejar de comer para conseguir nuestro empleo, nuestro carro, nuestra casa, que vamos a agradar a Dios. Es juzgando con equidad, teniendo misericordia de los demás, ayudando a la viuda, al huérfano, al extranjero, y al pobre; y no pensando mal contra nuestro hermano que realmente ayunamos para Dios y no para nosotros mismos. Meditemos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario