viernes, 28 de septiembre de 2012

Una profecía de hace 4,000 años.

Dice la escritura que "Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta" (Números 23:19). Y, hace alrededor de 4,250 años Dios le dió una profecía a Moisés para que se la comentara a su pueblo israel.

Esa profecía decía: "Aún cuando tus desterrados estuvieren en las partes más lejanas que hay debajo del cielo, de allí te recogerá Jehová tu Dios, y de allá te romará; y te hará volver Jehova tu Dios a la tierra que heredaron tus padres, y será suya; y te hará bien, y te multiplicará más que a tus padres" (Deuteronomio 30:4-5). El pueblo de Israel fue esclavo en Egipto; fue Cautivo en Babilonia; y fue disperso por todo el mundo y sus confines en tiempos del Imperio Romano. A esa dispersión que causó el Imperio Romano se refería ésta profecía. Y, a finales del siglo 19 inició un movimiento que fue denominado "sionismo", cuyo fin era alcanzar en el contorno de las naciones, el apoyo para que la tierra de Canaán que fuera quitada al pueblo de Israel pero que le había prometido Dios, le fuera devuelta nuevamente al pueblo de Israel. Dicho movimiento llegó al éxito de su misión en la Asamblea General del día 29 de noviembre de 1947, cuando la Organización de Naciones Unidas, aprobó en su asamblea número 49: "Que Israel era una nación". El 14 de mayo de 1948 la tierra física al fin le fue entregada a Israel. Y en junio de 1967 en la guerra de los 6 días, los israelitas recuperaon el muro de los lamentos y sus lugares sagrados para nunca más perderlos, pues Dios cumple lo que promete. 

Desde entonces todas las naciones árabes han tratado de aniquilar al pueblo de Israel. Hoy mismo, vemos en el panorama mundial que la nación árabe musulmana de Irán, antigua Persia, está tratando de aniquilar al pueblo de Israel. NO LO VAN A LOGRAR. La promesa de Dios para Israel es que NO serán removidos, y es más, cuando parezca que todas las naciones están en contra de Israel, y que por ello, su final está cercano, Dios mismo batallará por y para ellos (Zacarías 14:1-4). Oremos por el pueblo de Israel. Meditemos.

jueves, 27 de septiembre de 2012

No es bueno...

Casi todos los movimientos del hombre durante su vida son llevados por los sentimientos. Si de muchos de nosotros dependiera, no habría pobres sobre el planeta; pero a Dios en su diseño del Plan Divino le complació que hubieran pobres. Si de muchos de nosotros dependiera no hubiera enfermos en ésta vida, pero en el Plan Divino a Dios le complació que hubiera. Y, al decir le complació, no estamos implicando "gozo, alegría" sino simplemente que fue "su" voluntad soberana.

¿Por qué lo permitió? Porque tiene propósitos. Si ninguno tuviera necesidades, entonces, ¿cómo íbamos a practicar nuestra caridad? Si todos estuviéramos sanos ¿cómo íbamos a practicar la hospitalidad?. Pero, volviendo al tema de los sentimientos, lo que queremos enfocar es lo siguiente: "Dios, los ejemplos anteriores lo demuestran, no se mueve por los sentimientos sino por un plan bien elaborado y con un propósito específico". Lo vemos por ejemplo en el libro de los Hechos de los Apóstoles, cuando hubo murmuración entre los nuevos creyentes que eran griegos y que reclamaban que por no ser judíos no les daban las mismas porciones. Entonces los 12 discípulos convocaron a una reunión para elegir a los "diáconos" para que se dedicaran a "esa" tarea. ¿Por qué lo hicieron? La razón la dieron ellos mismos: "no es bueno, no es agradable, no complace" (verbo: Arestos) a los ojos de Dios que DEJEMOS la oración y la palabra de Dios para servir" (Hechos 6:1-3). Los apóstoles no permitieron la injusticia pero tampoco, por "sentimientos", dejaron la labor para la que habían sido encomendados.

Hoy, nosotros debemos de estar en las "tareas o ministerios" que el Señor nos puso, traspasar esos límites es actuar con los "sentimientos", y, en determinado momento podemos no agradar a Dios, y por supuesto, difícilmente tendremos su respaldo. Pidámosle a Dios que nos indique cuál es nuestro ministerio y tratemos de desarrollarnos en él. Meditemos.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Cuando hayas pasado el Jordán.

Muchas eran las leyes, normas, y estatutos que tenían que cumplir quienes conformaron el pueblo de Israel en la antiguedad. Cuando estudiamos el Pentateuco, o sea, los cinco libros de la Ley de Dios lo podemos ver. Sin embargo, Dios siempre ha tenido un tiempo y una ocasión para todo y eso es lo que debemos observar.

En el libro de Deuteronomio en el capítulo 27 iniciamos a ver qué es lo que Dios quería demandar de su gente. Y, ayer al igual que hoy, muchas personas hemos asumido en determinado momento que "todas" las personas debiéran de cumplir con esos estatutos, pero la realidad es que Dios las puso "solamente" para SU pueblo. Por lo tanto quienes no son pueblo no tienen por qué cumplirlas, lógicamente, no tienen tampoco por qué recibir los galardones que Dios ofrece a quien sí las cumple. Ahora bien, metiéndonos en el tema: ¿Quiénes y cuándo debían empezar a cumplir la Ley?  En ese mismo capítulo lo vemos: "el pueblo de Dios" (verso 1). ¿Cuándo debía el pueblo empezar a cumplir esos estatutos? Hasta pasar el Jordán (verso 2). Este punto pareciera solamente una información más, pero no es así. Si recordamos la historia nos daremos cuenta que ciertamente Moisés sacó de Egipto más o menos 4 millones de personas, pues dice la escritura que eran como 600,000 hombres sin contar mujeres y niños (Exodo 12:37); pero, no olvidemos que al estar en el desierto fundieron una imágen de oro para adorar, y fue entonces que Dios les dió la sentencia de que todos los mayores de 20 años no entrarían a la tierra prometida (Números 14:29,30,34) sino que caerían muertos en el desierto.

Por eso fue que el tiempo establecido para cumplir la Ley iniciaba "después" del Jordán, para que todos los que debían morir murieran. La pregunta es ¿Hemos pasado nosotros el Jordán? Si es así, entonces estamos obligados a cumplir las normas, los estatutos, las leyes de Dios, de lo contrario no. Pero si no estamos obligados a cumplir todo eso, entonces tampoco somos su pueblo y tampoco alcanzaremos sus promesas. Meditemos.

martes, 25 de septiembre de 2012

Hay perdón, pero también hay factura.

Pongamos el ejemplo de que usted entra a un almacén para comprar una lavadora, pero, en lo que está viendo la lavadora retrocede un poco y tira al suelo un televisor pantalla plana de 42 pulgadas que vale alrdedor de $ 800 o su equivalente en moneda nacional. Usted lo primero que tiene que hacer es disculparse, lo más seguro es que la disculpa sea aceptada porque viene de todo corazón, pero, el televisor lo tiene que pagar. Usted no puede salir de la tienda sólo por haber pedido disculpas y ya.

En lo espiritual nos sucede lo mismo, muchos creen que se puede cometer un pecado, pedir disculpas de todo corazón y que la vida continúe como si nada hubiera sucedido. NO. No es así. Supongamos que usted siendo casado, tiene una relación amorosa con una su vecina, la vecina con el tiempo espera un bebé suyo, y todo el mundo se empieza a enterar. Usted "quiere" solucionar el problema, lo primero que hace con todo y su verguenza es pedir perdón a Dios, con él el asunto es bastante fácil porque no baja de los cielos con el dedo acusador como lo hacemos los humanos; luego el segundo paso, pedir perdón a su esposa con el consabido dedo acusador, pero supongamos que como lo pide de todo corazón le es concedido. Luego tiene que pedirle perdón a su vecina, como lo hace de todo corazón también le es concedido. Y ya, ¿problema solucionado? Pues no, porque en nueve meses viene la "factura". Y ese niño estará allí hasta que él se muera, o, hasta que usted se muera. Un ejemplo de ésto es el pecado que David cometió en contra de Betsabé, y la factura tan cara que pagó David.

Hay personas que no conocen a Dios y que no lo tratan de conocer porque creen que "hay pecados que Dios no perdona", pues les tenemos unas buenas noticias, "no hay pecado que Dios no perdone" si nos acercamos de todo corazón. Lo que sí tenemos que entender es que "aún y cuando" el perdón "llega o es concedido", las "consecuencias" (léase la factura) las tenemos que pagar tarde o temprano, por poco o por mucho tiempo. Meditemos.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Los estorbos siempre son quitados.

Hace aproximadamente un año el Señor nos llevó a escribir de éste tema, pero hemos sentido fuertemente volver a mencionarlo, pues estamos en tiempos espiritualmente muy dificiles y tenemos, como soldados de Cristo que somos, ser preparados cada uno en lo individual, y, quien no se someta a los tratos del Señor será eliminado de la lista de acción.

En la escritura vemos muy claramente lo que sucede con quienes son un estorbo en los planes del Señor. El ejemplo más claro y el que siempre predicamos es del "insensato", que por cierto eso significa su nombre, Nabal, el esposo de Abigaíl. Nos narra el libro de 1era. Samuel en su capítulo 25, que David cuidaba en tiempos difíciles las propiedades de Nabal pero cuando David necesitó un favor de Nabal, éste se opuso y no reconoció ninguno de los favores a David. Siendo así, David iba dispuesto a quitarle la vida a Nabal cuando la esposa de éste, Abigaíl, se adelantó a los planes de David y llevándole comida para él y sus soldados calmó su enojo y salvó a Nabal. Más tarde vemos que es Dios quien enferma a Nabal y lo quita de en medio cortándole la vida. También más tarde vemos la recompensa para Abigaíl por ser intercesora y portadora de la paz, llegó a ser la esposa del Rey David. Otro caso elocuente es el de Herodes, éste era un estorbo para el ministerio de Jesús, por eso Dios le dice a José que esconda al niño en Egipto, lugar a donde José lo lleva con María y de donde lo trae otra vez a Jerusalén "hasta que", Herodes había muerto (vea Mateo 2:13-15).

Nosotros podemos llegar a ser "estorbos" en la vida espiritual de alguien. Podemos, pero no debemos. Ojalá si ese estorbo fuera para evitar que alguien se meta en problemas espirituales sería bueno, pero, si nuestra intervención es para ocasionar un mal espiritual a otros, cuidado. Dios ha demostrado que siempre ha quitado los estorbos. No seamos nosotros uno de ellos. Meditemos.

sábado, 22 de septiembre de 2012

¿Jugando a ser cristiano?

Lo hemos mencionado en otras oportunidades pero creemos que es necesario recordarlo. "Muchas personas estamos jugando a ser crisitanos", y eso no agrada a Dios. Ser cristiano no es cuestión de algo que nos de "un lugar" especial en ninguna parte; ser cristiano no es para que nos sintamos los papás de los pollitos en ningún lugar; ser crisitano no debiera de hacernos sentir que somos más que los otros porque ellos no fueron elegidos.

El ser crisitiano no implica tener una "religión", el cristianismo NO es una religión, es una forma de vida. Por creer que el cristianismo es una religión es que hemos caído en un esquema de vida en el cual nos hemos llegado a creer y a sentir "superiores" a los demás; hemos llegado a creer y a decir pensamientos que no están en el corazón de nuestro Dios. Ser cristiano no implica una serie de ritos y tradiciones como cantar cuanto coro nos llega a las manos, asistir por inercia a los servicios, compartir con los "hermanos" actividades eclesíasticas que más parecen actividades sociales, etc. El ser cristiano es un "método de vida diferente al que lleva el mundo". Jesús dijo: "Padre, guárdalos, porque ESTÁN en el mundo pero NO SON del mundo" (Juan 17:15-16). Ser cristiano es "llegar a conocer a Dios", incluso eso fue lo que Jesús dijo que los que llegaran al cielo pasarían haciendo por toda la eternidad (Juan 17:3). Ser cristiano no es hablar bonito y actuar mal; ser cristiano no es andar alabando el nombre de Dios y dejando tras de sí una estela de problemas y conflictos pensando que Dios los va a enderezar. Ser cristiano no implica que podemos pasar por sobre cualquier persona porque somos hijos de Dios y ellos no. Ser cristiano no implica ir y dejar a todo el mundo con la boca abierta de las "maravillas" que Dios ha hecho en nuestras vidas, pero tener a la espalda una vida de fracasos.

Ser cristiano implica una vida de santidad, esto es "apartada" del mundanal qué hacer de la calle; ser cristiano implica cumplir con todas nuestras obligaciones; ser crisitano implica pegarnos a Dios no al mundo y sus placeres; ser cristiano implica una responsabilidad que está por encima de las responsabilidades de los demás, por la sencilla razón de que "eso" sí nos hace diferentes al mundo. Ese tipo de crisitanismo es el que Dios espera de nosotros, el que implica "sacrificio" no el que implica "egoísmo e irresponsabilidad". De lo contrario sólo estamos "jugando" a ser cristianos. Meditmos.


viernes, 21 de septiembre de 2012

Ayuda solidaria.

Muchos gobiernos hoy en día están dando lo que se ha denominado "ayuda solidaria" a personas necesitadas, dicha acción nació a raíz no sólo del hecho de que hay tremendas necesidades a nivel mundial, sino más bien por el hecho de que hace ganar votos a la hora de las elecciones venideras.

El punto de vista de ayudar a los demás, jamás será mal visto ni por los hombres de buena fe ni mucho menos por Dios. El punto es que, se debe encontrar un equilibrio para que lo que es "ayuda" solidaria no se convierta en "carga" solidaria. Nos explicamos. Qué bueno es que cuando tenemos necesidades provocadas o no por nosotros mismos, alguien venga y nos tienda la mano en ayuda, pero, es "ayuda" para mientras que salimos adelante, no debe de entenderse por "manutención" obligada. Lastimosamente muchos gobiernos no explican eso a las familias recipientarias, lo que está causando muchos problemas sociales alrededor del mundo. Eso exactamente nos puede suceder a nosotros en la iglesia, cuando ayudemos a alguien hagámosle saber que es una "ayuda" mientras que sale adelante, no es una "adopción". Lo vemos muy claramente en la iglesia primitiva, cuando nosotros estudiamos el libro de los Hechos de los Apóstoles vemos cómo funcionaba la iglesia en sus albores. Todos traían lo que tenían, ni siquiera lo que podían sino lo que tenían... ¿para qué? Para que NADIE tuviera necesidad (Hechos 4:34). Y, el Espíritu de Dios se movía de tal forma que cuando alguien se quería pasar de listo... simplemente moría (vea el caso de Ananías y su esposa Safira en Hechos 5:1-11).

Cada vez que podamos ayudar, si Dios nos indica que tenemos que ayudar, hagámoslo... pero, indiquemos que es una "ayuda" no una "adopción", pues como vemos en el caso de Ananías y Safira esa ayuda hasta puede llegar a ser de mayor problema que bendición. Meditemos.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Uso y abuso de la Ley (respuestas)

En relación al mensaje del uso y abuso de la Ley, y, con respecto a la forma en que fueron establecidos el diezmo y el matrimonio por Dios, se nos hicieron algunas preguntas. Trataremos de responderlas con respaldo bíblicamente.

¿El diezmo fue instituido en especie porque no había dinero circulante todavía? Respuesta: NO. En Génesis 14, Abraham le da los diezmos a Melquisedec pero no le da dinero, sino le da "bienes" (vea el verso 20). En éste punto Abraham tiene alrededor de 75 años, pues recién va a recibir la promesa de un hijo, y, 25 años después nace ese hijo (vea Génesis 17:1) y Dios le habla a Abraham en términos de "dinero en efectivo" como el que "utilizó" para comprar sus esclavos, esclavos que ya tenía en Génesis 13:1, o sea, antes de que diezmara. ¿Cuando se habló del "rescate" del diezmo, se dijo que Dios no podría convertirse en un agiotista porque a él no le agrada el agiotismo, en dónde lo dice? Lo dice en Deuteronomio 23:19: "No exigirás de tu hermano interés, ni interés de comestibles, ni de cosa alguna de que se suele exigir interés".  Con respecto a los matrimonios ¿quién entonces sí se puede casar y quien no en un motivo de fornicación? Se puede casar la persona "ofendida", no así la "ofensora". La razón es muy sencilla, si nos referimos a lo que la Ley establecía el procedimiento era el siguiente: "La persona que era encontrada en adulterio o fornicación, debía ser apedreada ese mismo día, hasta constatar que estuviera muerta" (Levítico 20:10). Esto, automáticamente quitaba del camino al "ofensor" y dejaba como viudo o viuda a la persona "ofendida", y según la Ley de Moisés una persona viuda podía y puede volverse a casar. En otras palabras, hoy, como ya no se apedrea a los adúlteros ni a los fornicarios, el resultado es que la persona "ofendida" viene a ser una persona "viuda espiritual", por eso se puede volver a casar.

No olvidemos que Dios no dejó ningún hilo suelto en la escritura, y aún, cuando pareciera que en algunos casos hay dudas y hasta contradicciones, si buscamos bien en la Palabra de Dios, él nos permitirá ver SU verdad absoluta. Meditemos.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Matrimonios en un hilo.

Todos conocemos cómo funcionan las marionetas, son muñecos que alguien atrás del telón maneja por medio de hilos. Según el hilo que quien esté detrás mueva así serán los movimientos del muñeco que está por delante del telón.

Lastimosamente hoy, nuestos matrimonios son como marionetas pues el clima de inestabilidad emocional, inestabilidad económica, social, y hasta política ha venido a molestar a nuestros hogares más de lo que nosotros hubiéramos querido, y mucho más de lo que nos damos cuenta. Satanás se ha dado a la tarea, y muy fructífera por cierto, de empezar a atacar y destruir nuestro matrimonios. Es increíble la cantidad de separaciones que se están dando a nivel mundial de parejas que hace algún tiempo se unieron con tanto amor. La tarea del diablo está siendo más fructífera de lo que muchos pensamos, él está moviendo los hilos exactamente para donde quiere, como quiere, y cuando quiere y el resultado está siendo muy pero muy exitoso. En los últimos tiempos nos hemos enterado de muchas separaciones y muchos divorcios aún de personas que se "supone" caminan con Dios. La tarea de la oración como que la estamos dejando por un lado debido a los afanes de la vida. La tarea de la comunicación está siendo tirante y estresante en lugar de ser reconciliante entre nuestros matrimonios. Las relaciones están siendo demasiado personalizadas, demasiado egoístas, vistas con el ojo de: "Si esto me pasara a mí, haría tal acción". No estamos viendo las situaciones ajenas como ajenas sino como propias, y eso nos hace ponernos a la defensiva en toda charla.

Solamente la oración diaria, solamente la comunión constante con Dios hará que ésta situación cambie. De lo contrario nuestros matrimonios se irán a pique como les está sucediendo a muchos. "Honroso sea en todos el matrimonio, y su lecho sin MANCILLA (no vendible) dice la escritura en Hebreos 13:4.  Meditemos. 

martes, 18 de septiembre de 2012

Uso y abuso de la Ley (Parte 3), final.

Como dijimos en el mensaje de ayer: DIOS NO NECESITA EL DINERO. Lo que quiere es que formemos un corazón amoroso, misericordioso, y dadivoso como el de él. El Señor por medio del apóstol Pablo nos habla cuando le habló a Timoteo diciendo: "Si algún creyente o alguna creyente tiene VIUDAS, que las MANTENGA, y no sea gravada la iglesia" (1era. Timoteo 5:16). ¿Sabía usted que con el diezmo puede mantener a una viudad de su familia, antes que ésta sea GRAVOSA para la congregación, y que Dios no lo va a castigar por ello?

¿Sabía usted que la palabra DIEZMO aparece "solamente" en 14 ocasiones en toda la escritura, que 13 son en relación a la Ley del Antiguo Testamento (que ya caducó), y una solamente en el Nuevo Testamento y lo hace como "referencia" al Antiguo Testamento (vea hebreos 7:9). ¿Sabía usted que Abraham no le enseñó a diezmar a Isaac? ¿Sabía usted que el diezmo de Jacob no fue impuesto por Dios, sino ofrecido por él mismo y "condicionado" a lo que Dios le fuera a dar? (vea Génesis 28:22). Sabía usted que Jesús no mencionó el diezmo en ningún momento, sino que lo que pedía era que "ofrendaramos". ¿Sabía usted que la palabra "ofrenda" aparece 322 veces en toda la escritura, comparado con 14 de diezmo? ¿Sabía usted que la palabra ofrenda aparece 302 veces en el Antiguo Testamento y solamente 20 en el Nuevo? ¿Sabía usted lo que Pablo enseñó acerca de la ofrenda y el compartir? Pablo dice: "En cuanto a la ofrenda a los SANTOS (nótese que no es para construir templos, ni para mantener ostentosamente a los líderes o al pastor), haced también vosotros de la manera que "ordené" en las iglesias de Galacia. Cada primer día de la semana cada uno de vosotros PONGA APARTE "ALGO", según haya prosperado, guardándolo como ofrenda..." (1era. Corintios 16:1). Estamos diciendo que porque el diezmo ya no existe, no hay que dar nada. NO, NO, y NO. Lo que estamos diciendo es que nuestra ofrenda debe ser MAYOR al diezmo por amor y agradecimiento por lo que recibimos (den según hayan "prosperado" dijo Pablo). Pero que debemos de darlo a los SANTOS como se nos enseña, no para construir templos de vanidad, no para mantener ostentosamente a los líderes, no para satisfacer el ego de un hombre que se hace llamar un líder de Dios y que vive exactamente opuesto a como su Dios vivió cuando estuvo sobre la faz de la tierra.

Dios quiere formarnos con un corazón dadivoso, con un corazón como el de él. ¿Qué pensaríamos de una esposa que le sirve 30 tazas de café al esposo porque esa es su obligación, una taza por día, y que si quiere más que se las sirva él? ¿ No es eso lo que hacemos cuando le damos un cheque a la congregación por 825.35 dólares, quetzáles o lo que sea nuestra moneda?  ¿Escatimamos los centavos? ¿Acaso para pedirle a Dios somos igual de exactos? Al menos hagamos el cheque por 826, o mejor por 850 ú 875  ¿No le parece? Cuando demos, demos pero como lo hace el Señor con nosotros, a manos llenas. Meditemos.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Uso y abuso de la Ley (Parte 2).

Dios NO necesita el dinero. Pero nos enseñó a dar porque quiere que lleguemos a tener un corazón amoroso y desprendido como el que él mismo tiene. Quiere que nuestra felicidad no esté en estar acumulando todo, sino en compartir todo lo que tenemos para que NADIE tenga necesidad. Esto lo vemos reflejado en la Iglesia primitiva (vea Hechos 4:34 en donde "nadie" tenía necesidad).

Desde el mensaje anterior hemos estado hablando acerca del MAL uso y el abuso que se está haciendo de la Ley de Dios. Hoy hablaremos del famoso diezmo. En la Ley de Dios estaba darlo, esto era parte del Antiguo Testamento. No estamos en contra de que se dé, más bien pensamos que si sólo eso damos estamos siendo "tacaños" con Dios por todo lo que él nos da a nosotros. De lo que sí nos apartamos y lo hemos dicho clara y concisamente en ésta ventana desde el inicio,  es, el mal uso y abuso que se hace de él. No creemos que agrade a Dios que los líderes o alguien más vivan con abundancia y ostentosamente con el dinero de los diezmos, cuando en la congregación hay hambre, penas, enfermedades, y familias con escasez. Lea usted Levitico 27 el verso 31: "Y si alguno quisiere RESCATAR algo del diezmo, añadirá la quinta parte de su precio por ello". Pregúntele a su pastor: ¿Si Dios aborrece a los "agiotistas", cómo entonces él se convierte en uno sumándole el 20% a su diezmo, si usted lo quiere rescatar? ¿Cómo es eso de que "podemos" rescatar dinero con dinero? En ninguna manera lo hace. Lo que sucede es que el diezmo no era "dinero", Jesús lo dijo: "era el diezmo del trabajo" (léase frijol, azucar, ganado, frutos, etc. vea Mateo 23:23). Hoy, por comodidad y por conveniencia damos el dinero, pero no es para que NADIE viva ostentosamente, sino "debiera" de ser para cubrir las necesidades de los "necesitados dentro de la congregación".

¿Sabía usted que JESUS regañó y censuró a los líderes religiosos porque ellos a su vez censuraban a las ovejas por "querer" utilizar el diezmo para ayudar a sus padres, y los hacían sentir culpables si así lo hacían, y que les dijo que "eso no era correcto" negarlo? En otras palabras, Dios prefiere que usted ayude a "sus" padres especialmente si éstos son creyentes; a que usted lleve el dinero a la iglesia. Si tiene dudas lea Marcos 7:11al 13 en donde Jesús deja BIEN CLARO que no hacerlo es INVALIDAR la Palabra de Dios por la TRADICION. Por si usted no es de los que ven claramente los mensajes subliminales le explicamos: DIOS, no nosotros, DIOS, ve como "tradición" el diezmo pero ve como "su ley" el ayudar a los padres. ¡Qué contraste con lo que muchos líderes predican y practican el día de hoy! ¿ no le parece? Meditemos.

sábado, 15 de septiembre de 2012

Uso y abuso de la Ley (Parte 1).

Muchos nuevos creyentes no tienen el discernimiento entre qué es vivir bajo la "Ley" y qué es vivir bajo la "Gracia". Vivir bajo la Ley es seguir tratando de cumplir los estatutos de la "Ley de Moisés", pero no sólo bajo los 10 mandamientos, sino bajo las 613 leyes que contenía la Ley de Moisés. Y, vivir bajo la gracia, es vivir cumpliendo los mandamientos que Jesús nos dió bajo la "Gracia del Espíritu Santo". Así de simple.

Otro punto importante es que muchos confunden la "Ley de Moisés", que comprende los primeros cinco libros del Antiguo Testamento, con que todos los libros del Antiguo Testamento son la ley. No. Repetimos, son sólo los primeros cinco libros que conocemos con el nombre de Pentateuco (penta= cinco; teuco= libros o escritos). Ahora bien, el problema es que cuando Jesús estuvo sobre la tierra dijo que lo antiguo (la Ley de Moisés) quedaba caduco o cancelado (hablando del Pentateuco), y que, de ahora en adelante se viviría bajo la "gracia del Espíritu Santo" (Hebreos 8:13). Preguntamos entonces ¿Cuánto de la Ley anuló Jesús? ¿Anulo parte o toda la ley? ¿Si anuló el Pentateuco, anuló todo lo que está en el Pentateuco o sólo una parte? Respuesta: TODO. Pero lastimosamente el hombre siempre que mete las manos en algo, lo arruina. Y en los asuntos de Dios no ha sido la excepción. Casi todos los pastores, líderes, o directivos de las congregaciones ANULAN casi toda la ley, situación que es NO correcta, pues Jesús anuló TODA la ley. Nos explicamos con un primer ejemplo. Cada vez que alguien se va a casar con un divorciado o divorciada, luego sacan a relucir la Ley de Moisés, y ponen reparos, sin analizar el caso como lo hizo Jesús.

Jesús dijo que el divorcio NO era posible SALVO en un sólo caso. Cuando hay "fornicación" de por medio (vea Mateo 5:32). La palabra "fornicación" es muy extensa en el hebreo pues implica éstas situaciones: Adulterio, fornicación, homosexualidad, lesbianismo, zoofilia (sexo con animales), y hasta idolatría. Preguntamos entonces ¿Quién está en lo correcto, Jesús o un líder cuyos propósitos son oscuros? ¿La ley quedó caduca toda, o sólo una parte? Meditemos.

jueves, 13 de septiembre de 2012

A quien él quiere.

Muchas veces hemos discutido con creyentes y con no creyentes, el hecho de que la soberanía de Dios nos vuelve como piezas de ajedréz que él mueve a conveniencia y según sus planes. ¿Por qué hay algunos que nacieron ricos y otros que nacieron pobres? ¿Por qué muchos nacimos sanos y otros nacieron enfermos? ¿Por qué unos nacimos hombres y las otras nacieron mujeres?

Todas esas y otras preguntas que nos pudiéramos hacer, solamente tienen respuesta si nosotros aceptamos que Dios es omnipotente (que todo lo puede hacer), y soberano (que nadie le dice qué hacer). El Salmo 24:1 nos dice: "De Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo, y los que en él habitan". Preguntamos nosotros ¿Qué dueño de algo, no puede hacer lo que se le antoje con ese algo? ¿Si él es el dueño del mundo y de los habitantes que lo moramos? ¿Qué le impide repartilo como a él le guste? ¿Quiénes somos nosotros para cuestionarlo?  Vemos la soberanía de Dios en detalles en la escritura. ¿Qué de bueno hizo Pablo, para que Dios lo esccogiera como uno de los bastiones del evangelio? ¿Acaso no fue Pablo un asesino? ¿Cómo se nos hubiera ocurrido a nosotros escoger para llevar el evangelio a otras naciones a una persona que perseguía y mataba a quienes se decían seguir el evangelio? En otro sentido, ¿Por qué Nuestro Señor Jesucristo ni siquiera le responde una sola pregunta a Herodes, cuando Herodes había construido un templo para su pueblo? ¿Sabía usted que el templo que Herodes había construido, era más grande y más fastuoso que el que construyó Salomón 900 años antes? Entonces ¿Cómo Jesús no complace a Herodes con una "señal" que era lo que Herodes quería ver, y ni siquiera le dirije la palabra? (vea Lucas 23:8-9).

Dios le da, le concede, se brinda a quien él quiere, no al que quiere. Sin embargo la escritura nos da ejemplos de personas que por suplicar y suplicar reciben. Hagamos eso, pidamos, supliquemos, intercedamos, agrademos el corazón de Dios, y entonces seremos de esos a quienes Dios les habla y les responde. Meditemos.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Los milagros.

Según las escrituras vemos que un milagro es una señal extraordinaria, una manifestación fuera de lo normal, algo que no sucede todos los días, o, que aún sucediendo no la puede realizar cualquier persona. Por ejemplo de ésto último podemos decir que, cada luz de amanecer es un milagro pero como sucede todos los días no le damos la importancia que se merece.

Sin embargo hay acontecimientos que nosotros sí vemos como milagros porque no suceden todos los días, o al menos, si suceden nosotros no nos enteramos. Por ejemplo, supimos de una pareja que habiéndo luchado con las armas que Dios da, no con las del hombre, no podían tener hijos, pero, luego de mucha oración y de haber recibido una profecía recibieron la bendición de poder engendrar una criatura. Ese es un milagro. Ahora bien, lo importante con los milagros por supuesto, aparte de que qué maravilloso que sucedan debiera de ser el "cambio" que implicaría no sólo en quien lo recibe sino en quienes los rodeamos. Cuando nosotros vemos en las escrituras que por un milagro, Pablo es tirado de su montura, se queda ciego, recibe una palabra, esa palabra se cumple en su totalidad y luego vemos su cambio de vida, entonces decimos "los milagros debiéran de cambiarnos la vida y radicalmente". El problema es que, el corazón humano es muy duro y en ocasiones escuchamos los milagros, en ocasiones hasta tenemos el privilegio de verlos, pero no cambiamos. ¡Qué lamentable! ¡Qué desperdicio! En una ocasión Jesús dijo: "¡Ay de tí Corazín! ¡Ay de tí Betsaida! porque si en  Tiro y Sidón se hubieran hecho éstos milagros, hace tiempo que se hubieran convertido (Mateo 11:21).

¿Hemos visto milagros y no nos hemos convertido? ¿Hemos visto milagros y seguimos siendo los mismos iracundos, despreocupados, arrogantes, vanidosos, desordenados que éramos, y nos seguimos diciendo convertidos? Los milagrso existen hoy como lo existieron hace dos mil años cuando Jesús estuvo sobre la faz de la tierra. Pero ¿Nos cambian la vida como se las cambió a ellos? Meditemos.

martes, 11 de septiembre de 2012

El Ecumenismo.

Como lo hemos estado comentando en los últimos días, y aún que no lo hubiéramos hecho, es una realidad que el mundo está tan convulcionado como en pocas épocas en la historia. Política, social, económica, y espiritualmente, ésta época que estamos viviendo casi que sólo se puede comparar en convulción a los años 1,100 o 1,200 cuando el papado(Lucio III con la bula Ad abolendam, llamada Santa Inquisición o Santo Oficio) inició la inquisición.

Políticamente, no hay nación conforme, golpes de estado, dictadores unos, hombres y mujeres que gobiernan bajo el símbolo de la democracia pero que son dictadores escondidos los otros. Socialmente, vemos un amor egoísta en cada persona, que se refleja en la seriedad y mal genio con que la gente camina en la calle, pensando solamente en solucionar sus problemas y casi nunca en ayudar a otros. Económicamente, cada día se hacen más lejanas las clases sociales ricas con las pobres, y la clase media hemos tendido a desaparecer; Espiritualmente, las falsas religiones engañando a diestra y a siniestra, especialmente con el famoso "ecumenismo", haciéndo creer unos a otros que no importa la religión que se tenga, Dios acepta a todos. Con razón Jesús lo primero que advirtió a sus discípulos cuando le preguntaron acerca de éstos días que estamos viviendo dijo: MIRAD QUE NADIE OS ENGAÑE (Lucas 21:8). Satanás, la serpiente antigua, el dragón como lo llama Apocalípsis, sabe bien que una verdad envuelta con mentiras es más creíble que una mentira sóla. Eso es lo que está haciendo hoy en día con esas alianzas ecuménicas. ¡Cuidado! Jesús dijo: Y ENGAÑARA A MUCHOS (Marcos 13:6). 

¿Sabe usted de dónde nació el ecumenismo? Pues nació hace 50 años, exactamente de la misma fuente de donde nació la inquisición hace 800. (Concilio Vaticano I, de 1962 bajo las órdenes de Juan XXIII para declarar "Libertad religiosa" en donde pierden importancia la misa tridentina y los cánticos gregorianos, y se cambia o modifica la forma de celebrar los sacramentos). Meditemos.

lunes, 10 de septiembre de 2012

La última semana de Daniel.

Daniel, debido a que se vió obligado a participar en los sueños del rey Nabucodonosor (Daniel 2), tuvo muchas inquietudes acerca de lo referente a las setenta semanas de años a que se refería Dios con respecto a su pueblo Israel (Daniel 9:24). Luego de haber orado y pedido a Dios que se las explicara, él nos explica en su libro, cómo Dios estableció lo que se conoce como la "última" de esas semanas.

Habían de pasar en "total" 69 semanas de años de las 70, o sea, 483 años desde que salió la orden de restaurar los muros y la ciudad en tiempos de Ciro el Grande hasta la muerte del Hijo de Dios. Luego, se cumpliría la última semana de años, o sea, los últimos siete años de la profecía. Pero, y eso la historia lo muestra, no era inmediatamente. Primero había de establecerse un reino de 10 reyes o reinos, los cuales son representados por 10 cuernos que saldrían del antiguo Imperio Romano en Daniel 7:7; de esos 10 cuernos o reyes había de sobresalir uno, llamado también el "cuerno pequeño" (Daniel 7:8). Ese cuerno perqueño representa y es el hijo de pecado, el hombre de iniquidad, el príncipe que había de venir de aquél pueblo que destruyó la ciudad de Jerusalén en el año 70 de nuestra era (Daniel 9:26). Y, hasta entonces, hasta que éste príncipe asome su cabeza en la escena mundial estaría la posibilidad de que esa "última" semana iniciara. ¿Cómo iniciará? Pues el mismo Daniel nos lo dice en el verso 27 del capítulo 9: "haciendo un pacto con el pueblo de Dios". A la luz de la historia, preguntamos ¿Por qué los judíos no aceptaron a Nuestro Señor Jesucristo cuando vino? Porque estaba en el Plan Divino, Jesús mismo lo dijo: "Yo vine en el nombre de mi Padre, y no me recibísteis; otro vendrá en su propio nombre (el anticristo), y a ese recibiréis" (Juan 5:43). Los judíos no recibieron a Nuestro Señor Jesucristo cuando vino, porque en el Plan Divino está escrito que: "cuando lo judíos vean al anticristo firmando un pacto con ellos y para ellos, dándoles paz y seguridad, a él van a recibir como su mesías, a pesar de que no viene en el nombre del Padre sino en su propio nombre". Y, preguntamos: ¿Si los judíos dicen que "ese" es "su" mesías, quién en el mundo podrá decir que están engañados?

Jesús también dijo: "en el fin, mirad que NADIE os ENGAÑE" (Mateo 24:4). Y añadió: "MUCHOS" serán engañados (Mateo 24:5). ¿Sólo teniendo una relación íntima con el verdadero Mesías, podremos reconocer cuando venga el falso. Pero, si nos sentimos poco espirituales, el Señor aún así nos dejó una "señal"... el anticristo será aquél líder mundial que firme un "pacto" que traiga "aparente" paz y tranquilidad al pueblo de Dios. Meditemos. 

sábado, 8 de septiembre de 2012

Señales.

La escritura y la historia de la raza humana está plagada de ejemplos de personas que han, en determinado momento, pedido una "señal". Y para Dios ésta situación no está fuera de control en absoluto. Dios como creador de esa excepcional máquina que es el ser humano la conoce a la perfección, por ello, sin que nos hubiésemos dado cuenta desde el principio de la creación respondió a nuestra inquietudes. Veamos.

No había creado Dios aún al hombre, y ya había respondido a lo que él sabía serían sus incógnitas. En Génesis 1:14, la biblia nos dice: "Dijo Dios: Haya lubreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de SEÑALES para las estaciones, para los días y años..."  La palabra que Dios utilizó para decir: "señales" fue: "owth" cuyos significados son: señales, marcas, milagros o profecías. ¿Qué nos estaba diciendo entonces Dios? Dios estaba estableciendo su plan en los cielos, para qué, los hombres a los que él designara, los pudieran interpretar. ¿Por qué cree usted que Dios "prohibe" la astrología? ¿Por qué cree usted que Dios "permite" la astronomía? Dios prohibe la astrología porque es la forma humana de descubrir su plan; Dios permite la astronomía porque es la forma divina de conocer su plan, pero, sólo para personas que él autoriza. Nos explicamos. Los reyes de la tierra y de los imperios han querido conocer el estudio de las estrellas (astronomía), pero se han convertido en adivinos (astrología), pero eso a Dios no le agrada, por ello les envía un espíritu de confusión (el horóscopo por ejemplo). Pero los hombres que Dios autoriza sí se convierten en astrónomos y sí llegan a conocer sus planes, ¿para qué?, para que luego se los cuenten a su gente, a su pueblo. ¿Por qué Dios no castigó sino más bien premió a los "magos" que vieron al niño Jesús? Porque esos "magos" no eran de los que sacaban conejitos de un sombrero, sino eran llamados así en esos tiempos por ser astrónomos. ¿Y qué fue lo que vieron? "La estrella de Jesús" (Mateo 2:2). La palabra utilizada aquí para "estrella" es "aster", de la cuál deribamos "astros".

¿Cuál fue la "estrella" que vieron los reyes magos cuando nació Jesús? Fue "Arturus o Arturo", la estrella más brillante de la constelación "Alfa Centauro" que es la constelación solar más cercana y más parecida al Sistema Solar nuestro. Y que, en el año en que nació Jesús, estaba situada "exactamente" en el ombligo del signo zodiacal "virgo" que representa a una "virgen". Esto es, dándo la SEÑAL de que una virgen iba a tener un niño como lo describía Isaías en 7:14, casi 650 años antes de que sucediera. "Señales" hay, pero no para los hijos dle diablo sino para los hijos de Dios. Meditemos.

viernes, 7 de septiembre de 2012

Las promesas de Dios.

Inmediatamente después del Diluvio Universal, Dios le dice a Noé: "Estableceré mi pacto con vosotros, y no exterminaré ya más toda carne CON AGUAS de diluvio, ni habrá más DILUVIO para destruir la tierra" (Génesis 9:11).

Si esa fue una promesa de Dios para con Noé, y Dios siempre cumple sus promesas entonces preguntamos ¿Por qué razón toda la gente habla de un fín del mundo? ¿Por qué cuando los cielos derraman grandes cantidades de agua, la gente teme otra tragedia de esa magnitud? La razón es muy sencilla. Lo que Dios prometió fue: No volver a destruir la tierra CON AGUA. Pero no prometió no volverla a destruir. En Isaías 66:15 y 16 leemos: "Porque he aquí Jehová vendrá CON FUEGO, y sus carros como torbellino, para descargar su ira con furor. Porque Jehová juzgará CON FUEGO y con su espada a todo hombre; y los muertos de Jehová serán multiplicados". La "teoría" de los ecologistas de que la tierra se está calentando y que los mares se agrandarán e inundarán la tierra nuevamente ES FALSA. Primero, lo que Dios traerá inmediatamente no es el fin del mundo, lo que Dios traerá será un cambio de era, una nueva dispensación para el hombre. Esta nueva era o dispensación el Señor la denominó: El reino milenial de Cristo. Y segundo, las naciones serán juzgadas CON FUEGO no con agua. Miremos lo que nos dice Apocalipsis para el tiempo de los juicios a las naciones: "Id derramad sobre LA TIERRA las siete copas de la ira de Dios" (Apocalipsis 16:1). "Y el cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado QUEMAR a los hombres con fuego" (Apocalipsis 16:8).

Lo que los ecologístas nos advierten de que la tierra se está calentando es "verdad". Lo que los ecologistas dicen que ese calentamiento derretirá los polos y la tierra se inundará es "mentira". La tierra será destruida por Dios, pero no ahora. Lo que ahora se acerca es la destrucción de una humanidad impía, una humanidad materialista, una humanidad egoísta, una humanidad idólatra de sí misma y de ídolos. Y cuando esa humanidad haya desaparecido de la faz de la tierra, entonces el Señor repoblará el mundo con gente que lo ame, que lo siga, que lo venere sólo a él, y donde él por supuesto, será el Rey. Meditemos.

jueves, 6 de septiembre de 2012

Por sus frutos los conoceréis.

"El arbol bueno da buenos frutos, pero el árbol malo da malos frutos; por sus frutos los conoceréis". Estas fueron palabras de advertencia que Jesús les dió a sus discípulos cuando iniciaba su ministerio (vea Mateo 7:17 y 20).

Cuando nosotros vemos en el principio de la escritura cómo Dios hizo una separación entre la simiente de la mujer y la simiente del diablo, vemos claramente que por sus frutos se conoce a la gente. Después de ser desterrado Caín por asesinar a su hermano Abel, vemos que de sus descendienes salen frutos malos: Caín tiene un hijo al cual llama Enoc, y construye una ciudad a la cuál le pone el nombre de Enoc (Génesis 4:17), éste como veremos ya es otro mal fruto de Enoc. Pues en los Salmos se nos dice que: "Los que confían en sus bienes y que confían en sus riquezas (los impíos que no tienen fe). Su íntimo pensamiento es que sus casas serán eternas, por eso dan sus nombres a sus tierras" (Salmo 49:6 y 11). Luego, Enoc tiene hijos entre quienes le nace uno llamado Lamec, éste es el primer hombre sobre la faz de la tierra que es bígamo. Y sabemos que la infidelidad desagrada a Dios. ¿Cuál fue el resultado de todos éstos pecados? Que fueron gentes que el Diluvio barrió. En otro sentido, y para no confundirnos, de la linea pía también existieron hombres con los nombres de éstos impíos, pero con otros frutos. De la descendencia de Set, nació un Enoc, pero de éste se dice que camino con Dios y fue arrebatado al cielo (Génesis 5:24). Más tarde nació uno llamado Lamec, de quien nacería Noé (Génesis 4:29), quien en el año del Diluvio, año en que murió Matusalén (se puede probar con las genealogías bíblicas) y cinco años después de la muerte de su padre Lamec, era el único hombre sobre la faz de la tierra que agradaba a Dios (Génesis 6:8).

"Si hubiéran sido de nosotros, no hubiéran salido de nosotros. Estos son anticristos, pues niegan que Jesús es el Cristo, y niegan al Padre". Estas fueron palabras de Juan el apóstol en su primera epístola en el capítulo 2 y versos 19 y 22. A los cristianos los reconocemos por sus frutos y porque permanecen entre nosotros, pero a los impíos se les reconoce porque niegan que Jesús sea el Cristo, niegan al Padre, y se apartan de nosotros. Meditemos. 

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Como león rugiente.

Una de las razones por las cuales un león ruge en la selva es porque tiene hambre, ciertamente ruge para advertir a sus enemigos que ese es su terrirtorio, que él es el jefe de esa zona, que las leonas que están allí son suyas, que allí, él manda. Pero su rugido de hambre es uno de los más fuertes y temerosos que tiene.

Nos dice la escritura que el enemigo, nuestro adversario, el diablo, anda como león rugiente alrededor viendo a quién devora. Esa es una advertencia que el Señor nos hace a quienes somos su pueblo, por ello dice: a los enemigos del diablo (nosotros) (1era. Pedro 5:6). Cuando somos niños y adolescentes estamos bajo los cuidados de los padres, bajo el cuidado de nuestros maestros, y aún en la universidad tenemos algún tipo de seguridad y cuidados sobre nosotros. Pero, el día que salimos a trabajar al mundo, ese día entramos al campo enemigo. Ese día es el día en que nos entregan en el ejército nuestra mochila con todos los implementos necesarios para que vayamos, y luchemos nuestra propia batalla con la advertencia de que entramos en campo minado. No estarán nunca más nuestros padres, nuestros abuelos, nuestros maestros, nuestros tutores cuidándonos y diciéndonos qué hemos de hacer y qué no. De allí en adelante todo depende de nuestras propias decisiones. El jefe será implacable, nuestros compañeros de trabajo serán no amigos sino la competencia. El que esté a nuestro lado no será un aliado sino un enemigo más. La única persona en la que podremos confiar será Dios y nosotros, y con ésto más, nosotros mismos no somos confiables. Nuestras debilidades, nuestros defectos, nuestros setimientos nos pueden traicionar. Engañoso es el corazón del hombre dice la escritura.

Solamente saliendo en el nombre de Dios, confiándonos en sus preciosas manos, solamente desconfiando de nosotros mismos, sabiendo y estando conscientes de que somos débiles, que somos carne fresca para el enemigo, solamente así, estaremos más seguros en un mundo corrupto, en un mundo hábil de querernos comer como un león rugiente por  y con hambre. Meditemos.

martes, 4 de septiembre de 2012

La idolatría.

Uno de los problemas más graves de la idolatría es que la persona que la practica la niega. Esto lo vemos desde que el Señor escogió a su pueblo. Vemos que los padres de Abraham fueron sacados de un contexto idólatra, libro de Josué, capítulo 24 y verso 2. Pero a Dios no le agradaba por eso los sacó de allí diciéndole a Abraham, vete de tu tierra.

Luego, Dios permite que la descendencia de Abraham sea esclava en Egipto, y al salir, lo primero que hacen es fabricar un ídolo (el becerro de oro en el desierto) pero ellos niegan que ese becerro sea un ídolo, según ellos es una "representación" de Dios. Sin embargo, a Dios no le agradó. Otro problema serio, y que veremos en un tiempo muy cercano quienes hoy estamos sobre la tierra, es que, Aarón como sacerdote que era permitió esa imagen (Exodo 32:25). Luego, llega el tiempo de los reyes y el pueblo vuelve a tener ídolos, imágenes, las cuales niegan que sean sus dioses sino tan sólo creen que son "representaciones", pero a Dios tampoco le agradó. Hoy en día muchas personas tienen en la sala de su casa, en el comedor, en el pasillo de entrada, imágenes, pero ellos niegan que sean dioses, creen que son "representaciones" de Dios. Pero a Dios no le agrada eso. La pregunta lógica y sencilla aquí es: ¿Si nosotros le decimos a nuestra esposa que NO nos agrada la limonada con sal, sino que nos gusta con azúcar? ¿Cómo puede ella llegar a creer que "sólo" porque la hace con inmenso amor, respeto, y toda su buena voluntad nos va a agradar que la haga con sal? Lo mismo sucede con Dios. EL NO QUIERE IMAGENES, EL NO QUIERE IDOLOS. ¿Cómo podemos llegar a pensar que "sólo" porque de todo corazón, con el mayor amor, con la mayor solemnidad le ponemos una candela a una imagen que "creemos" que lo representa, lo vamos a agradar? Adorar una imagen creyendo que esa imagen "representa" a Dios, es idolatría.

Y, el problema más grave de que quienes practiquen la idolatría hoy en día es que, pronto pero muy pronto aparecerá el anticristo sobre la tierra, y con él, el falso profeta. ¿Sabe usted cuál es el oficio del falso profeta? Erigir una IMAGEN del anticristo para "hacerlo pasar por el Dios verdadero". El anticristo tendrá tantos poderes que engañará a muchos dicen las escrituras. La pregunta obligada es ¿Los que hoy practican la idolatría, cómo se librarán de adorar la imagen del anticristo, máxime que, el falso profeta va a ser un "religioso" que diga. ¡Este es el Mesías! (vea Apocalipsis 13, especialmente el verso 14. No deje de leer el verso 8 porque quien adore la imagen NO es de Dios, ni va al reino de Dios) Meditemos.

lunes, 3 de septiembre de 2012

¿Quién es el cuerno pequeño en Daniel?

Daniel fue un profeta que tuvo muchas inquietudes acerca del fin de los tiempos, éstas inquietudes le nacieron a raiz de la visión que Dios le dió acerca del sueño que tuviera Nabucodonosor. Daniel se atrevió a preguntárselas a Dios (Daniel 8:15-16), y Dios, en su inmensa misericordia no sólo se las explicó, si no le dijo cuándo y cómo sucederían (Daniel 8:17-26).

Lamentablemente, no sólo para Daniel sino para muchas personas hoy en día, esas inquietudes de Daniel hablan de problemas y problemas serios; hablan de angustia, pero de angustia en extremo; hablan de hambre, pero hambruna; hablan de destrucción, pero de gran desolación. Hablan de extremos para la vida de los que vivan esas situaciones, extremos tan serios que Daniel tan sólo de "saberlas" se enfermó algunos días. No logramos imaginar cómo serán de graves esos tiempos para que Daniel tan sólo de conocerlas se haya afligido tanto, vea Daniel 8:27. A Daniel se le dijo que la imagen que había visto Nabucodonosor era una parábola o figura de lo que vendría. La cabeza de la imagen representaba al Imperio de Babilonia (Daniel 2:38); luego el pecho representaba al Imperio Medo-Persa (Daniel 2:32 y 8:20); el vientre representaba al Imperio Griego (Daniel 2:32 y 8:21); las piernas representaban al Imperio Romano (Daniel 2:33 y 7:7); y los 10 dedos de la imagen (Daniel 2:33), son 10 reyes (Daniel 2:42-44), 10 reinos (2:41) y 10 cuernos (Daniel 7:7 y Apocalipsis 13:1). Como se puede ver en la descripción de la imagen, de las piernas de hierro, o sea, el Imperio Romano, salen los 10 dedos que son de hierro y barro, y que son parte del mismo Imperio Romano. Y, de esos 10 dedos que son también como ya vimos 10 reyes, 10 reinos y 10 cuernos, sale un "cuerno pequeño"... ese es el anticristo. El hombre de iniquidad, el hombre de perversión, el hombre que querrá suplantar al Mesías en los tiempos del fin.

Engañará a MUCHOS mas los "entendidos" resplandecerán dice Daniel en 12:3. ¿Cómo hacemos para ser entendidos en éstos tiempos del fin? Pues con una relación íntima, diaria, y permanente con Dios. Conociendo al verdadero Mesías no seguiremos a uno falso, por muchas maravillas y prodigios que haga. Pues el anticristo tendrá esas habilidades y hasta pensará en cambiar las leyes y los tiempos (Daniel 7:24-25). Meditemos. 

sábado, 1 de septiembre de 2012

¿Cómo será el anticristo?

Primero que todo hemos de decir que el anticristo no es una organización, no es un grupo, no es ninguna iglesia, ni un sistema, según palabras del mismo Señor Jesucristo, el anticristo es una sola persona. Jesús dijo en Juan 5.43: "Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibís, si otro viniere en su propio nombre (el anticristo), a ese recibiréis". Por lo tanto es una sola persona.

Segundo, va a ser un hombre al cual los judíos van a aceptar como su mesías, y si los judíos dicen que ese hombre es el mesías judío, entonces preguntamos ¿cómo no lo va a creer mesías el mundo ignorante de los asuntos de Dios? (Daniel 9:27). Punto tres, será un hombre de gran inteligencia, gran estrategia, y gran poder de lo contrario ¿cómo podría hacer que los 10 reyes que estarán gobernando el mundo económica, política, y socialmente le entreguen el poder? Pues eso es lo que nos indica Daniel en su visión en Daniel 7:7-8. Cuarto, será un hombre de mucho carisma, elocuencia y tremenda estrategia militar, de lo contrario no podría manejar a los ejércitos y confundir al mundo como se ve en Daniel 7:24-26. Un punto importante para que sepamos quién es el anticristo, es que cuando inicie su ascenso públicamente, hará un pacto con el pueblo de Israel. El firmará un pacto de paz con el pueblo de Dios, eso hará creer al mundo que éste hombre tiene la solución a todos los problemas sociales, pues ¿quién más podría tenerlo, sino sólo él, que aparentará venir a poner solución a la guerra más antigua de la humanidad? (ver Daniel 9:27).

El mundo de hoy está convulcionado y convulcionando, no hay empleos, hay hambres, hay terremotos en todos lados, todo el preámbulo que Jesús profetizó para los últimos tiempos está a la orden del día (Mateo 24:6-8). Solamente hace falta que se hagan presentes "públicamente" los 10 reyes (que tienen que salir del antiguo imperio romano, según dice Daniel en 2:32 y 7:7); que gobiernen el mundo por un poco de tiempo (una hora dice Apocalípsis); que el anticristo los anule (dice Daniel 7:8 y Apocalipsis 13:4), y entonces vendrá la apostasía (2da. de Tesalonisenses 2:3). Muchos, incluso gente con algún conocimiento de Dios, caerá en la trampa. Solo aquellos que conozcan la verdad por una intimidad con Dios, no lo seguirán. Y entonces, vendrá el Hijo de Dios por su pueblo. Meditemos.