miércoles, 29 de febrero de 2012

El que causa divisiones... está condenado.

Pablo, el apóstol de Jesucristo, le escribe a Tito en la siguiente forma: "Yo, Pablo, (apostolos) "enviado" de Jesucristo, a los (ecklektos) "los electos por selección de Dios" (Tito 1.1). Te dejé en Creta, para que corrigiéses lo deficiente (Tito 1:5).

Recuerda que cuando establezcas ancianos, éstos deben ser irreprensibles, maridos de una sola mujer, que tengan hijos creyentes que no estén acusados de rebeldías. Porque es "necesario" que los obispos sean irreprensibles como administradores de Dios, no dados al vino, no codiciosos de ganancias deshonestas, amantes de lo bueno, justos, santos, "retenedores de la Palabra fiel" (Tito 1:5-9). Las ancianas asímismo sean reverentes, que enseñen a las más jovencitas a que sean prudentes (Tito 2:3-6). Pero acaso el consejo más importante que Pablo le concede a Tito es el siguiente: "Pero tú habla lo que está de acuerdo a la SANA DOCTRINA (Tito 2:1). Un líder de Jesucristo no debe apartarse de la sana doctrina de Jesucristo, ese es el resumen de la epístola. Y la cierra en el capítulo 3 y versos 10 y 11 diciendo: "Al que cause divisiones (hairetikos) o sea herejías o falsas doctrinas; a ese amonéstalo una y otra vez, y si no se vuelve atrás, entonces "deséchalo, niégalo" (paraiteomai).

Y concluye Pablo diciendo: "pues él mismo se ha condenado, se ha puesto fuera" (paraiteomai)(Tito 3:11). El evangelio que Cristo predicó es el evangelio de la cruz, sin el cual NADIE entra al reino de los cielos. Jesús no dijo: "Tomen su reino y síganme, él lo que dijo fue: TOMEN SU CRUZ y síganme". Cualquier otra doctrina, evita que lleguemos a ser irreprensibles, guiadores de nuestra casa, y nos lleva a causar divisiones. Meditemos.

martes, 28 de febrero de 2012

El error de los inicuos.

Durante toda la escritura es muy notorio que para Dios existen personas buenas y malas; personas santas y personas impías; personas que lo aman y personas que no lo aman; personas que le obedecen y personas que le son rebeldes.

El apóstol Pedro cuando escribe su segunda epístola la dirige a personas que "han alcanzado la fe", lo que implica que hay personas que "no" alcanzan la fe. Y se dirige a ellos con éstas palabras: "sed participantes de la naturaleza divina, huyendo de la corrupción del mundo" (verso 1:4). Se los digo yo, que: "no os lo cuento como fábula humana, sino habiéndo visto con mis propios ojos su majestad" (verso 1:16). Así que: "no os dejéis llevar por herejías destructoras de falsos maestros, de los cuales ya hubo en el pasado" (verso 2:1). Pues los cielos, la tierra, y los hombres impíos que existen ahora están guardados para perdición" (verso 3:7). "Así que, amados, vosotros sabiendo de antemano todo esto, guardaos" (verso 3:17). La palabra para inicuos en griego es "Athesmos" que significa: "malvado, perverso, muy malo".

El error de los pervesos nos dice Pedro, es negar la verdad de Dios substituyendo la Palabra divina por palabras humanas; negar la verdad fiel con el error humano; y negar que la venida de Cristo es una realidad que destruirá al mundo con fuego. Meditemos.

lunes, 27 de febrero de 2012

El día de los galardones, el día de los reconocimientos.

Todo ser humano no solamente está deseoso sino necesita de un reonocimiento. Toda actividad humana tiene en mayor o menor grado un reconocimiento, en ocasiones ese reconocimiento muy merecido no llega pronto, en otras quizás no es tan merecido, y sin embargo, llega pronto. Pues como en toda decisión humana se cometen errores.

Cada cuatro años todas las naciones participan del Campeonato Mundial de Fut; cada año se celebra el evento de la mujer más bella del mundo; cada año la academia entrega los premios a los mejores artistas y películas. Pero, como decíamos al principio, debido a los errores humanos (como sucedió hace dos años en los premios de la Academia Cinematográfica), la estatuilla dorada se lo dan a otra persona; por interéses económicos, el Campeón Mundial de Fut resulta no ser el mejor equipo del campeonato como sucedió en 1,938; 1,966 y 1,978. Y, la mujer más bella del mundo, resulta no ser la más bella, por interéses políticos o por el color de su piel como ya es muy conocido. Con Dios, esos errores, esos interéses, esas conveniencias NO VAN A SUCEDER. Quien merezca un galardón (Misthos: premio, recompensa, galardón) lo va a recibir.

Pablo nos habla en sus epístolas incesantemente, incansablemente, que todo aquél que trabaje para la obra de Cristo recibirá un premio, un galardón, un reconocimiento. El Tabernáculo con sus tres áreas cada una más cercana al trono de gracia, es un ejemplo de los galardones; la parábola del fruto de la semilla es otro más, unos dan fruto al 30, otros al 60, y otros 100 por uno; el día del juicio divino se abrirán los libros dice Apocalipsis (20) y cada uno recibirá su galardón según las obras que haya efecturado. Meditemos.

sábado, 25 de febrero de 2012

No somos de los que retroceden para perdición.

El escritor del libro a los Hebreos, les explica a los creyentes de aquél tiempo y a los creyentes de éstos últimos tiempos (verso 1, capítulo 1), que Dios ha hablado siempre al hombre en diferenes formas, pero que ahora, lo hizo por medio de su Hijo.

¿Cómo nos habló por medio de su Hijo? En que vino a ser el resplandor de su gloria, purificó nuestros pecados en la cruz, y luego subió al Padre a sentarse a su diestra (verso 3). Lo constituyó pues, nuestro celestial apóstol y sumo sacerdote (verso 1, capítulo 3); para que oyésemos HOY su voz, pues de no hacerlo no se entrará en su reposo (Katapausis: Metafóricamente hablando: recibir las bendiciones celestiales que Dios ofreció a quienes perseveren en Cristo, su Hijo, después de superar las pruebas hasta el final)(versos 7 al 11, del mismo capítulo 3). Pues sostiene el escritor que, hay quienes ante esas pruebas "retroceden" (Hupostole: retirarse) para "perdición" (Apoleia: destrucción, ruina, miseria eterna en el infierno) (verso 38-39 del capítulo 10).

Lo que el escritor entonces nos está diciendo es que: El creyente llega a ser creyente si oye la voz de Dios dada en éstos últimos días por medio de la muerte de cruz de su Hijo. Y, que quienes habiéndo sido "iluminados" por esa verdad (verso 32 del capítulo 10), si se retiran de esa iluminación (por cierto conocer esa verdad es muy distinto que aceptarla), lo único que les espera es una miseria eterna en el infierno. Pues no tuvieron fe en él, prueba de ello o coincidencia, es que el capítulo siguiente a esta declaración, el capítulo 11 de Hebreos, habla solamente de los hombres de fe. Meditemos.

viernes, 24 de febrero de 2012

¿Por qué dice que esperaban al esposo y no al novio?

"Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que esperaban al ESPOSO... vino el ESPOSO y las que estaban preparadas entraron a las BODAS" (Mateo 25:1 y 10). ¿Si ya era el esposo, por qué venía para las bodas?

En las costumbres y tradiciones judías existía algo que no existe entre las demás naciones, el DESPOSORIO. Una pareja de enamorados hace el compromiso de casarse, y desde el día del compromiso hasta el día de la boda, ya son declarados esposos. No viven juntos sino cada uno en la casa de sus padres, y oficialmente se declaran pareja en una ceremonio pública el día que el esposo decide llegar por su futura compañera después de un año, ánunciando el día pero no la hora. Por ello es que la mujer tiene que velar porque sabe el día pero no la hora en que llegarán por ella, y cuando la lleguen a tomar ella tiene que estar lista. Por ello se prepara con tiempo, para que cuando el esposo llegue ella sólo sea tomada. Esa es la analogía que Nuestro Señor Jesucristo nos hace aquí en Mateo 25. Quizás hoy no sabemos el día de su venida, pero en su momento nos lo hará saber pues él es nuestro esposo y nosotros como congregación somos su esposa. No ha habido boda aún, pero ya hemos sido escogidos.

Estamos, como congregación, en el tiempo del DESPOSORIO pues ya hemos sido elegidos (todos aquellos que hemos hecho una confesión de fe en el sacrificio de Nuestro Señor Jesucristo en la cruz), solamente esperamos el día y la hora en que él venga por nosotros a la BODA DEL CORDERO. Meditemos.

jueves, 23 de febrero de 2012

¡Si el justo con dificultad se salva!

El apóstol Pedro, en su primera epístola les escribe a todos aquellos judíos que por las persecusiones causadas por haber dejado la religión judía, hubieron de escapar exiliados al Ponto, a Galacia, a Capadocia, a Asia, y a Bitinia. Lo que nos dice que no eran pocos los expatriados (1era. Pedro 1:1).

Les dice: "Vosotros ELEGIDOS (Ecklectos: sacados fuera, creyentes llamados o escogidos por Dios); según la presciencia (Prognosis: un prearreglo, una previsión, una premeditación de Dios) para ser rociados con la sangre de Jesucristo (1era. Pedro 1:2). Luego sigue exhortándolos a que, debido a ese privilegio por el cual no hicieron absolutamente nada, sean santos (verso 15) y vivan con temor todo el tiempo de su peregrinación por ésta vida. Pero, lo que más impacta de ésta epístola, al menos en lo personal lo decimos, es el verso 18 del capítulo 4: "Si el justo (Dikaios: los rectos, los que obserban la ley, los virtuosos, los que guardan los mandamientos) con dificultad se salvan (Sozo: son rescatados o preservados de la muerte y de la destrucción); entonces ¿qué acontecerá al impío y al pecador?

Durante toda la escritura, durante toda la humanidad, hemos visto a Dios SELECCIONANDO a una persona, a un pueblo, o a un grupo de personas sin que entendamos el por qué. Pero Pedro nos dice, que es según un prearreglo, una previsión, una premeditación de su parte. Siendo Dios soberano, preguntamos ¿Quién es aquél que se atreve a cuestionar a Dios? Meditemos.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Niños y Maestros.

Santigago, quien también es conocido como Jacobo, el hermano de carne de Nuestro Señor Jesucristo (véase Mateo 13:55 en donde se mencionan los 4 hermanos de Jesús, y sus al menos 2 hermanas); nos exhorta a que NO MUCHOS nos hagamos maestros (Didaskalos: Master, Maestros, Doctores) de la Palabra de Dios.

Todo ser humano que haya vivido en cualquier época de la historia de la humanidad, ha tenido algún grado de responsabilidad en su caminata. Se tienen responsabilidades como niños, como adolescentes, y ya no digamos como adultos. Se tienen responsabilidades en lo material, en lo laboral, en lo familiar, en lo secular, pero sobre todo en lo espiritual. El escritor de Hebreos (que hasta el día de hoy permanece en el anonimato) les llama la atención a los muchos creyentes a quienes se dirige, acerca de que llevando ya mucho tiempo en la Palabra de Dios, seguían siendo niños (porque no entendían lo elemental, que Jesús era un sacerdote más alto y más sublime que Melquisedec), y que por lo tanto eran como niños espirituales, y por eso mismo, no les podía hablar con temas más profundos. Por otro lado, tenemos como ya se mencionó a un Santiago, que nos exhorta a que no nos hagamos maestros de la Palabra muchos de nosotros.La responsabilidad de ir por delante de algunos como maestro de la Palabra de Dios, es muy grande y por lo tanto no se debe ni se puede hacer a la ligera.

No se trata de alcanzar notoriedad, no se trata de sentirse parte de la élite de Dios, no se trata de alcanzar un medio de vida (mucho menos esto), se trata de guiar a otros que están iniciando su carrera espiritual en la verdad, en la doctrina pura, llevarlos sin interéres ocultos, llevarlos con un amor fraternal no fingido. Meditemos.

martes, 21 de febrero de 2012

Procuren ocuparse en buenas obras.

La gran mayoría de personas adultas trabajamos, nuestro horario de trabajo varía dependiendo cada actividad por supuesto, pero las escrituras nos exhortan a que, además de nuestras labores diarias, el tiempo que nos queda libre lo ocupemos bien.

La forma en que las escrituras nos recomiendan utilizar ese tiempo es en hacer buenas obras. Nos hace falta nos dice Pablo, aunque directamente le esté hablando a Tito en su epístola, capítulo 3 y verso 8: " Los que creen en Dios, procuren ocuparse en buenas obras". Ahora bien ¿qué considera Pablo como buenas obras?, en ese mismo verso lo dice: "lo que es útil y bueno para los hombres". La mejor manera que demos testimonio de que somos personas que conocemos a Dios, que estamos entregadas a Dios, no es precisamente tomando un mircrófono portátil y ponernos a gritar como locos en un parque, o en una calle, a decirle a todo mundo que se va ir al infierno si no acepta a Cristo. La mejor manera que tenemos de dar testimonio es SIENDOLO. Y somos testimonio cuando hacemos buenas obras, obras que sean útiles a otros.

La idea de Dios Padre cuando nos envió a su unigénito no sólo fue salvarnos, sino fue que nosotros también alcanzáramos a otros. Esa fue la misión que Cristo les encomendó a los doce, que le encomendó a Pablo, y que nos encomienda a nosotros. Y, como dice Pablo, una de las mejores formas de alcanzar a otros, es que nos vean haciendo buenas obras. Meditemos.

lunes, 20 de febrero de 2012

Un Dios bueno, amoroso y misericordioso.

No hay pueblo sobre la faz de la tierra que no tenga al menos un dios. Pero sólo hay un pueblo sobre la tierra que tiene al verdadero Dios. Ese Dios no es un Dios representado por NINGUNA religión. Simplemente, para quienes le conocen es un Dios bueno, amoroso, y misericordioso. Es el Dios padre de Nuestro Señor Jesucristo.

Sin embargo, es un Dios que también es justicia. Por ello, es un Dios que pone límites: En el Edén, puso el límite de no tocar de cierto fruto, pues traería un castigo. Adán y Eva no cumplieron con ese requisito, y por lo tanto, sufrieron las consecuencias. Ese mismo Dios le dijo al Pueblo de Israel que no cometiera idolatría, el pueblo cometió idolatría por lo tanto sufrió las consecuencias. Ese mismo Dios, dió a su Unico Hijo en sacrificio por la vida pecaminosa de todo ser humano, para que de entre todos ellos, quienes recibieran ese sacrificio como suficiente paga por sus pecados fuese salvo, y el que no lo creyere fuere condenado (atormentado) por los siglos de los siglos, pues no creerle a Dios es hacerle y decirle mentiroso. Sí, mentiroso porque se le está diciendo que no creemos que el Plan de él, sea suficiente para salvarnos.

Dios, ese único Dios verdadero, creador del mundo y todo lo que en él habita, es bueno, por ello nos creó; es amoroso, por ello nos proporcionó la oportunidad, en vida, de ser perdonados; es misericordioso, por ello nos tiene paciencia y nos espera hasta que de voluntad propia nos dejamos seducir por su amor; pero, también es justo, y quienes no cumplen con los requisitos que él pide... mueren irremisiblemente y para siempre, pues la reencarnación no existe. Meditemos.

sábado, 18 de febrero de 2012

Por los siglos de los siglos.

Juan, inspirado y guiado por el Espíritu Santo nos narra en el libro de Apocalipsis, cómo Dios Padre ejecutará el término de los días de los hombres bajo ésta tierra, que dicho sea de paso está cada día más cerca de ser cambiada por una nueva (Apocalipsis 21:1).

Después de transcurridos mil años (Apocalipsis 20:2), satanás es desatado por un poco de tiempo (verso 3); vemos una resurrección, en la cuál no resucitan todos los hombres sino sólo algunos (verso 5); vemos una muerte que tiene potestad sobre unos pero no sobre otros (verso 6); satanás es lanzado en un lago de fuego y azufre y "atormentado" (basanizo = torturado) por los siglos de los siglos (verso 10); se abren los libros de las obras y de la vida y de la muerte (verso 12); y vemos finalmente que, quien no es hallado inscrito en el libro de la vida, es lanzado al lago de fuego y azufre (verso 15). Ahora bien, en el capítulo 22 y verso 5, se nos habla que habrá quienes reinarán, ILUMINADOS por Dios el Señor, por los siglos de los siglos. Por pura coincidencia, resulta que la palabra siglos de los siglos en ambas escrituras (entiéndase Apocalipsis 20:10 y 22:5) es AION, cuyas definiciones en el griego original son: "Por siempre"; "Eterno"; "perpetuo"; pero también: "período de tiempo determinado" o "época o edad".

Una línea no tradicional de doctrina, el Universalismo, defiende que para términos de castigo (entendemos que tormento o tortura es castigo) AION se traduce "período de tiempo determinado o época", en otras palabras "un período que tiene principio y que tiene fin"; pero, para términos de reinado con el Señor, allí sí se traduce "por siempre"; "eterno"; o, "perpetuo". Esto no encaja en términos de que tenemos un Dios que es amor, argumento que ellos aducen para respaldar que TODOS los hombres, TODOS los ángeles caídos, y HASTA satanás serán salvos algún día. Meditemos.

viernes, 17 de febrero de 2012

Pero tú, sé sobrio y soporta las aflicciones.

Pablo, escribiéndolo a Timoteo en una segunda espístola le dice: "Timoteo, sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio" (capítulo 4 y verso 5), pero antes le habia escrito: "Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación" (verso 1).

Hay un día señalado por Dios y desconocido por nosotros los hombres, cuando Dios Padre se sentará en su trono blanco (según Apocalipsis) y juzgará a las naciones (personas de todo el mundo). Ese día, según nos narra el mismo Jesucristo en Mateo 25, será un día de galardones para unos pero de crujir de dientes para otros. Recibirán galardones quienes "hayan servido" en éste mundo, y crujirán los dientes quienes "se hayan servido" de éste mundo. Al menos eso deducimos de las palabras de Jesucristo en Mateo 25 de los versos 31 al 41. En otro sentido, muy pero muy contrario a lo que muchos pastores y líderes predican hoy, es muy notorio que Pablo en todas sus epístolas hable y exhorte a todo creyente, a que SUFRA las penalidades; a que SOPORTE las aflicciones; a que tenga PACIENCIA en las angustias, como lo hace en ésta epístola con Timoteo.

Es incríble cómo Pablo, quien inspirado por el Espíritu Santo escribiera casi todo el Nuevo Testamento, nos hable de angustias, de aflicciones, de penalidades, y hoy en día, líderes con oscuras intenciones NIEGUEN que el creyente debe de sufrir. Engañan a muchas ovejas diciéndoles que cuando lleguen a los pies de Cristo, TODO sufrimiento se acabó. Los sufrimientos del creyente no terminan nunca, lo que sucede es que no es lo mismo vivirlos "sin" Cristo que "con" Cristo. Meditemos.

jueves, 16 de febrero de 2012

¿Para qué sirven las escrituras?

Usted estudia libros de matemáticas para llegar a ser un ingeniero; usted estudia libros de medicina para llegar a ser un médico; o estudia libros de leyes para llegar a ser un abogado. Las escrituras se estudian para llegar a conocer qué es lo que Dios desea del hombre, y para que le enseñen a vivir agradando a Dios para alcanzar la salvación (2da. Timoteo 3:15).

Una persona entra a la universidad y estudia los libros correspondientes para alcanzar un título de ingeniero, arquitecto, abogado, etc. pero para ello, debe pasar pruebas, dichas pruebas implican aplicar lo que se supone estudió para estar preparado para ejecutar dicha carrera. Imagínese que alguien diga a las primeras pruebas (exámenes): "Mire maestro, yo vine a la universidad para que me den un título de ingeniero, arquitecto, o abogado, pero no para pasar pruebas ni mucho menos tener que ganarlas o tener que repetirlas". ¡NUNCA llegará a obtener un título de ninguna clase o categoría si no gana esas pruebas! Lo mismo sucede con el cristiano, muchos escuchan de Dios, se encantan con Dios, leen tres semanas las escrituras y ya... se quieren ir de misioneros por todo el mundo CON LOS GASTOS PAGADOS, EN PRIMERA CLASE, CON PUBLICIDAD POR TODOS LOS MEDIOS COMUNICATIVOS POSIBLES, pero, con la primera prueba... ya no quieren seguir. Pues a ellos un líder les dijo que "en el Señor" todo era paz, poder, y prosperidad. Eso de las pruebas no se los dijeron.

Pablo le dijo a Timoteo: "Si quieres ser obispo, buena obra deseas PERO... cumple con los requisitos" (1era Timoteo 3:1-13). ¿Deseamos ser un líder de Dios? Buena obra deseamos, PERO, un líder VERDADERO de Dios, tiene que ser un estudiante PROBADO Y APROBADO por Dios. Meditemos.

miércoles, 15 de febrero de 2012

Conoce el Señor a los que son suyos.

Pablo, escribiéndole una carta a Timoteo para animarlo y aconsejarlo que: "Avive el fuego del Señor que está en él, el mismo que habitó y aprendió de su madre Eunice y en su abuela Loida" (2da. Timoteo 1:5) también le recuerda lo siguiente.

"No te averguences de dar testimonio de Nuestro Señor, quien nos salvó y llamó con llamamiento santo" (versos 8 y 9); y procura presentarte con diligencia a Dios, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa BIEN la palabra de verdad (verso 15); pues el fundamento de Dios está firme, teniendo éste sello: "CONOCE el Señor a los que son suyos" (verso 19). ¿Qué significa la frase: Conoce el Señor a los que son suyos?. Bueno, por simple lógica, nos enseña que hay dos grupos de personas sobre la faz de la tierra, unos son del Señor, los cuales son conocidos de él; pero hay otro grupo que definitivamente no es de él, y por lo tanto él no los conoce. ¿A cuál grupo queremos pertenecer? Aquí, en el original el verbo "conocer" es mencionado con el verbo "ginosko" uno de cuyos significados es: "Tener una comunicación íntima con él".

¿Qué significa eso? Significa un intercambio de palabras todos los días, a toda hora, en cada momento, en cada decisión que se toma. No basta con leer un poco acerca de él; no basta con decirse ser de él; no basta con decir que se habla en nombre de él; hay que tener una comunicación diaria, continua, fuerte, permanente con él. De lo contrario aún y cuándo nosotros digamos que somos de él, él dirá que nosotros no somos de él. Meditemos.

martes, 14 de febrero de 2012

Salvos o condenados.

El hombre como ser espiritual solamente tiene dos caminos en la vida, o es salvo o es condenado. Sistemas débiles y que incitan al conformismo espiritual como la doctrina del Universalismo (que sostiene que como Dios es amor, no puede, por naturaleza, mandar a nadie al infierno, que por cierto según esa doctrina no existe) niegan.

Juan en su evangelio nos dice que habrá en el final de los tiempos, persona salvas espiritualmente y que habrá personas condenadas, y lo dice de la siguiente manera: "De tal manera amó Dios al mundo (Kosmos: la raza humana, los seres humanos), que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquél que en él cree, no se pierda (Apollumi: destruya, pierda, sea abolido), mas tenga vida eterna" (Juan 3:16). Y, en Juan 3:18 y 19 nos dice que: "El que en él (el Hijo de Dios) cree, no es condenado (Krino: separado, sacado, echado fuera); y que la condenación viene porque los hombres amaron más las tinieblas (Skotos: ignorancia de pensamientos divinos y derechos humanos, y se acompañan de pensamientos malvados e inmoralidad). Dios pues, no mandó a su Hijo como dicen los Universalistas, a condenar a una parte del mundo. Dios lo mandó para salvar a todos, lo que sucede es que unos amarán más su deliete que servir a Dios.

Y eso, no significa como dicen los Universalistas, que Dios "no pueda o no tenga poder". Sino que dentro de su plan está que los hombres que le sigan y le sirvan lo hagan voluntariamente. Ahora bien, tenemos que comprender que quién entienda el plan de Dios a cabalidad no existe sobre la faz de la tierra. Meditemos.

lunes, 13 de febrero de 2012

E irán al castigo eterno.

El capítulo 25 de Mateo nos narra cómo será el día en que Cristo venga en su reino, y nos dice que nombrará a unos y los pondrá de su lado derecho, éstos, serán sus OVEJAS; y pondrá a otros en su lado izquierdo, éstos, serán llamados CABRITOS. Como vemos, es Cristo mismo quien hace una separación. No es criterio ni designio de hombre alguno hacer esa división.

Les dice Cristo a los de la derecha: "Venid, BENDITOS (Eulogeo... consagrados) de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo" (Mateo 25:34). Pero a los de la izquierda les dice: "Apartaos (Poreuomai, larguense, váyanse) de mí, MALDITOS (Kataaromai... destino funesto, muerte), al fuego eterno (Aionios, eterno, sin fin, que nunca cesará, que será para siempre). Como podemos ver en éstos pasajes llegará un día, señalado por Dios desde el inicio de los tiempos, en que habrá un juicio y una sentencia; para los benditos, será un tiempo de galardones pero para los malditos, será un tiempo de mucho dolor. Existen corrientes actualmente que desdicen lo que Cristo afirmó, y confirmó con su muerte. Toman el amor de Dios como liberarlismo y lo enseñan como misericordia sempiterna para cubrir cualquier tipo de vida espiritual, asumiendo que un Dios de amor es IMPOSIBLE que castigue a un pecador.

Ciertamente el amor de Dios cubre cualquier pecado, pero hay condiciones que cumplir para ello. No podemos andar predicando a un Dios bueno porque sí, no importando si pasamos o no sobre sus leyes, normas, estatutos, y planes. Dios ama al pecador, pero aborrece el pecado, así que, mientras alguien no deje su pecado Dios no lo amará. Y si esa persona muere con ese pecado, será MALDITO para siempre e irá al castigo eterno sin otra oportunidad de salvación). Meditemos.

sábado, 11 de febrero de 2012

No nos escondamos de Dios.

Dios Padre, en persona, bajaba todos los días (Génesis 3:8) a platicar con Adán y Eva. Pero un día llegó y no los encontró, y dijo: ¿Dónde estás tú?. Dios en su omnipresencia sabía en dónde estaba Adán y Eva, pero la pregunta no era por el hecho de no verlos sino por el hecho de ver a dónde habían caído.

La respuesta de Adán fue: "Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí" (Génesis 3:10). No es acaso lo que nosotros hacemos, escondernos, cuando pecamos. Muchas personas dicen que son "ateas"; otras dicen que llevan la "religión" a su manera; otras hacen como que Dios es para "otros" más necesitados que ellos; otros hasta se atreven a profetizar que cuando se estén muriendo, entonces, arreglarán cuentas con Dios, con una vacía seguridad que tendrán tiempo para ello. La pura realidad es que "nos escondemos" de Dios porque sabemos que estamos desnudos delante de él, gracias a nuestros pecados. Solamente cuando Adán confrontó a Dios, entonces Dios en su infinita misericordia lo "vistió" con pieles para que tapara su denudez.

El arrepentimiento, y el exponernernos a la presencia de Dios hoy en día, es el antídoto para no escondernos de Dios. Todos pecamos y pecamos todos los días, pero la misericordia de Dios quiere que NO nos escondamos de él. El desea que nos cobijemos en su regazo, para arrepentirnos del pecado y él nos dará la gracia para salir de "ese" pecado. Meditemos.

viernes, 10 de febrero de 2012

El hombre más espiritual.

No encontrará usted una persona que haya sido más espiritual, y que haya tenido más relación personal e íntima con Dios, que Jesús. Fue un hombre que caminó bajo todos los lineamientos que Dios le impuso al hombre, puesto que los cielos no han estado abiertos permanentemente para nadie, como lo estuvieron para Jesús (Lucas 3:21-22).

Ahora bien, imagínese usted por un momento ¿Qué harían la gran mayoría de pastores y líderes de la actualidad, si una de sus ovejas muere, y, luego que oran y ayunan por el muerto, éste al tercer día se levanta? ¿Ya tiene la respuesta? Bueno, lo ayudamos: Todos o casi todos los pastores o líderes, montarían el video en internet; armarían la próxima noche o semana de oración por milagros; llamarían a todos los medios de comunicación para que lo divulguen; y por supuesto, el pastor o el líder saldría a la par del resucitado en TODAS las tomas. Esto sería aplicado a traer más fama a la congregación (si bien les va, sino sólo al pastor o al líder); más gente a la congregación con la falsa ilusión que para la próxima semana los próximos beneficiados serán ellos (los nuevos, previo a cumplir con la entrega de diezmos, dádivas, y ofrendas); etc. pero NUNCA sería utilizado el evento para darle la gloria y la honra a Dios. En otro sentido, usted ya leyó lo que ¿ese ser tan "espiritual" que conocemos con el nombre de Jesús, hizo después de resucitar?... SE SENTO A COMER CON SUS DISCIPULOS y se les presentaba sólo a los escogidos (vea Lucas 24.13-30; y Juan 21:4-15).

Difícil sino imposible sería que el día de hoy, alguien no utilizara la resurrección de un miembro de la congregación como medio de publicidad con razones interesadas o intereses ocultos. Sólo piense en esto, el hombre más espiritual que ha existido luego de resucitar, se sentó a COMER. No hagamos complicado a un Dios que ha querido ser sencillo ante y entre los hombres. Meditemos.

miércoles, 8 de febrero de 2012

La revelación de Jesucristo.

No hay medio de comunicación televisivo, escrito, o radial, que en éstos días deje por un lado el tema de: "Apocalipsis 2012". Ya sea por los geroglíficos de los Mayas; por lo que dejó escrito Nostradamus; o por lo que está inscrito en las pirámides egipcias, alguien toca todos los días el tema en algún medio de comuncación.

Apocalipsis, significa: "revelación". El apocalipsis bíblico, es ni más ni menos la revelación que Jesucristo le hizo al apóstol Juan en el año 95 de nuestra era en la isla de Patmos, que era en donde Juan estaba viviendo su exilio. Allí, dicen las escrituras que un ángel enviado de Dios, le explicó a Juan con todos sus detalles lo que acontecería al final de los tiempos, con el pueblo de Israel; con el mundo que no conoce a Dios; y, con su Iglesia. El ángel inició su exposición haciéndole ver a Juan el hecho de quién es Jesucristo (capítulo 1 y verso 8), y el poder que tiene (verso 18). Luego le expone que la visión que tendrá incluye lo que ya había pasado cuatro mil años antes de Juan; lo que estaba pasando en sus días; y, lo que pasaría cientos y miles de años después de él (verso 19). Para luego exponerle cómo han sucedido y cómo han de suceder (capítulo 2 y 3).

Dicho mensaje no solamente era literal sino también espiritual. Todo aquél que se crea un seguidor de Jesucristo, tendrá que vivir durante su caminata el mensaje o la revelación de Jesucristo a las 7 iglesias. Tendrá obras y arduos trabajos como la iglesia de Efeso; pero también tendrá cárceles como la iglesia de Esmirna. Tendrá qué demostrar su fe como la iglesia de Pérgamo; pero tendrá que ser servicial y paciente como la iglesia de Tiatira. Tendrá que vigilar como la iglesia de Sardis; y tendrá puertas abiertas como la iglesia de Filadelfia; pero no podrá ser tibio nunca como le advierten a la iglesia de Laodicea. Meditemos.

martes, 7 de febrero de 2012

En el día del bien goza del bien, pero...

La vida del hombre actualmente está, en latinoamérica, alrdedor de los 70 años en promedio. Creemos que por la misericordia de Dios, la gran mayoría de esos años son buenos, o al menos no tan malos como para muchas personas alrededor del mundo, especialmente como en el continente africano.

Dijo Salomón en Eclesiastés capítulo 7 y verso 14: "En el día del bien GOZA del bien; pero en el día de la ADVERSIDAD considera". ¿Qué significan esas palabras? Desde nuestro punto de vista y debido a las experiencias que el Señor en su sólo potestad nos ha permitido pasar, creemos lo siguiente: Muchos son los días buenos que Dios nos regala con vida, salud, una familia, un trabajo estable, la bendición de tener todos los días casi todo lo que necesitamos, y en ocasiones hasta algún capricho o gustito. Y él desea que gocemos de eso sin ningún desacomodo, pero, que eso no implique que si alguien a la par nuestra está en penas, en limitaciones, en escasecez, nos hagamos de la vista gorda. El Señor quiere que así como él nos extiende su mano preciosa, protectora, y dadivosa cada día, que nosotros hagamos (en la medida de nuestras posibilidades) lo mismo con esas personas.

Hoy no tocaremos el tema, pero desde esta ventana hemos expuesto el PECADO que se comete al llevar dinero a la congregación, cuando en la familia hay necesidades, Jesús mismo lo expuso. NO estamos diciendo que no se comparta dinero, lo que decimos es que PRIMERO se cubren las NECESIDADES de la familia, y LUEGO las de la congregación. Por eso es que Dios NO quería templos, sino casas en donde se le adorara. Meditemos.

lunes, 6 de febrero de 2012

¿Manual de supervivencia o la escala del dolor?

Lo hemos dicho una y mil veces desde ésta pequeña ventana al mundo: "A NADIE NOS GUSTA SUFRIR... pero TODOS tarde o temprano sufrimos". ¿Entonces, qué hacer? Cuando Jesucristo habló a sus discípulos y a nosotros por medio de ellos dijo: "El que quiera seguirme, tome su cruz, y entonces sígame" (Mateo 16:24).

La cruz, pesa; la cruz, lastima el hombro; la cruz, es un estorbo para poder caminar, pero TODOS los que siguimos a Jesús llevamos una, el que diga que no, o es un necio o no se ha dado cuenta que la lleva encima. Hace muchos años, cuando éramos jóvenes un primo nos dijo éstas sabias palabras: "Para el pobre la cruz es de madera, y para el rico es de oro, pero todos llevamos la cruz". CIERTISIMO. NADIE entrará al cielo si en su hombro no está la marca de cargar la cruz. La marca de ese peso, esa herida en el hombro, ese estorbo que llevamos toda la vida, es el pasaporte para entrar al cielo. Porque llevar la cruz significará que ACEPTAMOS seguir a Jesús. En un libro que se llama: "Manual para la supervivencia del ejecutivo", está una escala de valores para los sufrimientos, está probado que quien llega a 400 puntos en el término de 365 días, SEGURO tiene un paro cardíaco.

La escala es la siguiente:

100 puntos si................ Muere su cónyuge.
73 puntos si................ Sufre divorcio.
65 puntos si................ Se separa del cónyuge.
63 puntos si................ Muere un hijo o familiar cercano.
63 puntos si................ Va a la cárcel.
53 puntos si................ Tiene una pérdida personal importante.
50 puntos si................ Se casa.
47 puntos si................ Pierde el empleo.
45 puntos si................ Tiene una reconciliación marital.
45 puntos si................ Se jubila.
44 puntos si................ Existe enfermedad en usted o algún familiar cercano.
40 puntos si................ Hay un embarazo en el hogar.
39 puntos si................ Tiene problemas sexuales.
39 puntos si................ Hay un aumento en la familia por cualquier motivo.
38 puntos si................ Hay alteración económica positiva o negativa en casa.
37 puntos si................ Muere un amigo íntimo o de la infancia.

El apóstol Pablo sumó más de una vez 400 puntos, sin embargo no tuvo paros cardíacos... porque llevaba la cruz. Ahora bien, ésta escala no se puso para que nos COMPADEZCAMOS de nosotros mismos o hagamos competencia de ver quién sufre o sufrió más. El motivo de la misma es para que nos demos cuenta personal e íntimamente de COMO NOS CUIDA DIOS y de DONDE nos ha librado. Meditemos.

domingo, 5 de febrero de 2012

¿Por qué oramos por otros?

Pablo enseña a los creyentes de Roma que intercedan por otros, especialmente por los que están enfermos, pues Jesucristo intercede por nosotros siempre. Jesucristo nos da el ejemplo de lo que quiere que nosotros hagamos, él es nuestro guía.

Cuando uno ora por otras personas, uno se va sintiendo parte de su problema, o sea, lo va comprendiendo mejor. En ocasiones uno ora por personas que están pasando por los mismos caminos que a uno ya le tocaron pasar. Nadie mejor que alguien que ya haya pasado ese camino para aliviar la pena de otro. El pastor y escritor Charles R. Swindoll en su libro "Desafío a servir", nos dice: "Muchas personas están sufriendo, pero no sienten la libertad para decirlo hasta que voluntariamente nos acercamos a ellas para escucharlas". La pena, la escasez, la limitación económica, la necesidad nos dan verguenza, esa verguenza no nos permite hablar con cualquier persona, pues el prejuicio de que pensarán que no estamos haciendo la lucha suficiente,o, de que estamos en ésta situación por nuestra sola y absoluta culpa, sobrepasa el valor de poder abrir nuestro corazón. Pero, cuando una persona a estado orando por otra, y se acerca para decírselo, la persona en angustia abre su corazón sabiendo que va a recibir ayuda y no burlas o menosprecios.

Hoy, es alguien cercano o lejano a nosotros el que está en penas, pero, y ¿si mañana fueras nosotros? Acaso no nos gustaría que alguien se acercara y nos dijera: "Estoy orando por tí, y el Señor me dijo..." ¡Ah, qué alivio! el saber, por medio de alguien a quien sí vemos, que alguien a quien no vemos pero que él sí nos mira a nosotros... ESTA PENDIENTE DE NOSOTROS. Meditemos.

viernes, 3 de febrero de 2012

Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.

En el mundo dicen: "Todo lo que se siembra, se cosecha". Eso quiere decir que un árbol de manzanas nuna le dará peras; que un árbol de limones nunca le dará piñas. La semilla que uno siembra, germina y da su fruto. En lo espiritual también es así.

Hace casi 35 años nos venimos a vivir a una montañas muy lindas de Guatemala, cuando lo hicimos la opinión de todos era que estábamos locos, cómo nos veníamos a vivir con niños recién destetados a un lugar que parecía un potrero, rodeado de vacas, caballos, gallinas, cerdos, etc. de lo que en ese entonces eran fincas aledañas. Así de rústica era la colonia que vivíamos apenas 10 o 12 familias, entre ellas sólo dos éramos creyentes. Las reuniones de la asociación para protegernos eran de cinco miembros, y en una de las reuniones un vecino quien era muy religioso se levantó y dijo: "tenemos que controlar a los cristianos, porque si no dentro de poco toda la colonia estará llena de ALELUYAS haciendo bulla por todos lados". Esa persona nunca supo ni lo sabrá que estábamos reunidos en un garage que servía de templo los domingos; que él estaba sentado en una silla comprada por aleluyas; que la mesa en donde comimos la servimos aleluyas; y hoy, que a él le dió un derrame y está casi paralizado, no habla, y no puede valerse por símismo, somos los aleluyas los que oramos e intercedemos por él, los de su religión ni se acercan a su casa.

Todo lo que el hombre sembrare, eso también cosechará. Esta conclusión está en el libro de Gálatas en el capítulo 6 y verso 7, pero, la premisa de ese verso dice: "No os engañéis, Dios no puede ser BURLADO". La palabra griega para BURLADO es "mukterizo" que significa: No se ría de...; no se mofe de...; no sea burlezco con...DIOS, en éste caso. Lo que sembramos eso también cosecharemos. Meditemos.

jueves, 2 de febrero de 2012

Y a la medianoche, el ángel de la muerte fue enviado.

Egipto había sido castigado con 9 de las 10 plagas profetizadas por Moisés a Faraón, si éste, no dejaba ir al pueblo de Israel a adorar a Jehová al desierto. El Faraón, incrédulo y duro, después de haber visto el poder de Dios, se niega dejar ir al pueblo de Dios. Entonces la última plaga llega: El ángel de la muerte es enviado por Dios a la medianoche (Exodo 12:29).

Lo invitados a hacernos una pregunta: ¿Si el ángel de la muerte hubiese sido enviado ésta medianoche a nuestra casa, nos hubiésemos salvado? Los israelitas se salvaron porque Dios le había dicho que pusieran sobre los dinteles de sus casas, sangre de cordero rociada con un hisopo(vea Exodo 12:21-22). Hoy, la sangre que tenemos que tener en el dintel de nuestros corazones es la del Cordero precioso que fue, es, y será Jesucristo. Hoy, muchos en el mundo y en la congregación estamos viendo el poder de Dios alrededor nuestro, pero, al igual que Faraón, endurecemos el corazón con nuestro mejor y más delicioso pecado, eso, es el estorbo un corazón endurecido. Al igual que sucedió hace casi cuatro mil quinientos años aproximadamente, un día de éstos el ángel de la muerte será enviado a nuestras casas. ¿Nos salvaremos?

Creer en Jesucristo, hacer una confesión de fe por él, es tan fácil que parece que no sucederá nada. Pero María, la madre del hombre la hizo (dijo: Mi Dios y salvador); los discípulos la hicieron (Señor, a quién iremos, si sólo tú tienes palabras de salvación); Pablo la hizo (Señor mío, y Dios mío); nosotros también tendremos que hacerla. Esa confesión, es la sangre del Cordero sobre el dintel de nuestros corazones. Meditemos.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Vanidad y aflicción de espíritu.

Hemos predicado de esto en el pasado, pero creemos que nuevamente es la hora de tocar el tema. El hombre se desvela pensando en el mañana y madruga pensando en el hoy, y todo para qué, para que quien venga tras de sí tenga una vida más placentera que la que uno tuvo.

Si esa persona se da cuenta hoy o no, si se dará cuenta mañana o no de esa lucha, no lo sabemos. El hombre más sabio que ha existido después de Jesucristo, Salomón, escribió en Eclesiastés: "Miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu" (1:14). ¿Para qué se afana el hombre? Todos, especialmente en el medio latino, nos desvelamos por nuestras familias; en lugares como los Estados Unidos Americanos y Europa, la gente se desvela por y para sí misma. Pero sea lo uno o sea lo otro, dice Salomón que todo es vanidad y aflicción de espíritu. Si no se tiene porque ¿cómo han de llenarse las necesidades?; y si se tiene demasiado ¿cómo librarse de los que quieren a la fuerza o con astucia, lo que tanto nos ha costado? Como vemos, tanto lo uno como lo otro son vanidad y aflicción de espíritu.

No os angustiés por nada dijo Jesucristo ¿acaso mi Padre que está en los cielos no cuida aún de las flores del campo y de los animalitos? Fe, es vivir por lo que no vemos, no por lo que vemos. El creyente, teniendo o no teniendo recursos, tiene forzosamente, que vivir por fe ¿cómo seremos testimonios si no es así? Meditemos.